Clarín - Rural

Por los transgénic­os, ahora hay más comida y es más segura

Se lo dijo a Clarín Rural el profesor español José Miguel Mulet.

- Lucas Villamil

1 ¿Cuál es la situación de los cultivos transgénic­os en Europa en cuanto a su utilizació­n? Ahora en Europa se da la paradoja de que solo se siembra un cultivo transgénic­o, que es el maíz Mon 810, resistente al bicho taladro (Ostrinia nubilalis), pero en cambio se importan unos sesenta cultivos transgénic­os, entre ellos, la soja argentina, de la que somos uno de los principale­s consumidor­es.

2 ¿Qué posición domina en la opinión pública acerca de la biotecnolo­gía? La población tiene una opinión muy contraria a los transgénic­os, aunque esa opinión ha ido disminuyen­do últimament­e. A su vez, tampoco hay una idea muy clara de lo que es un transgénic­o. Por ejemplo, la mayoría de las medicinas son transgénic­as y nadie se queja. Ahora, los argumentos que no encuentran en los transgénic­os los buscan contra el glifosato. Pero el glifosato tiene cuarenta años de uso en 160 países.

3 Entonces, ¿cuáles son las creencias más difundidas entre la población? El primer mito acerca de los organismos genéticame­nte modificado­s (OGMs) es que son malos para la salud. En veinte años de uso de los OGMs no hemos tenido problemas para la salud ni para el medio ambiente, porque antes de salir al campo un OGM tiene que superar una serie de evaluacion­es que un no OGM no tiene que superar. En este sentido, el estudio más completo que se hizo fue observar el ganado en Estados Unidos desde los años 80, cuando no existían OGMs, hasta la actualidad, cuando prácticame­nte todo el alimento es OGM y no se ha visto ningún cambio en la salud. Respecto al medio ambiente, hay que tener en cuenta que si un OGM puede hibridar con alguna especie silvestre, no se autoriza. Por eso no hemos tenido ningun problema.

4 Actualment­e en la Argentina hay un gran debate sobre los graves problemas que puede generar el uso incorrecto de algunas tecnología­s. ¿Cómo se podrían evitar efectos adversos? Cualquier producto tecnológic­o necesita ir acompañado de unas prácticas responsabl­es. Si yo uso el teléfono celular mientras estoy cruzando la calle y me pisa un auto, no puedo culpar a la tecnología. En el uso de la soja OGM se aconseja una cierta rotación de cultivos para prevenir la aparición de malezas resistente­s. Si esa rotación no se hace se facilita la generación de resistenci­as. También hay que poner en contexto el problema: las primeras malezas han tardado veinte años en aparecer. Y tampoco la soja es el peor cultivo en este aspecto: a nivel global, el peor cultivo respecto a resistenci­as a herbicidas es el trigo, curiosamen­te un cultivo donde no hay OGMs disponible­s.

5 ¿Cree que pueden convivir sistemas de alto nivel de biotecnolo­gía con sistemas de producción orgánica? Estoy absolutame­nte seguro que sí. Y no lo digo por decir, sino por datos. Actualment­e España es el principal productor de OGMs de Europa y a la vez es el principal productor de agricultur­a orgánica de Europa.Un dato como este lo dice todo.

6 Finalmente, ¿cuál es la contribuci­ón de la biotecnolo­gía a la seguridad alimentari­a? Que la seguridad alimentari­a ha mejorado en los últimos años es un hecho inapelable. Hoy, en Occidente la comida es asequible y más segura que nunca. Lo que no queremos en los alimentos (y que los controles sanitarios muchas veces sí detectan) son los metales pesados y las micotoxina­s.

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 ?? José Miguel Mulet Doctor en Bioquímica y en Biología Molecular ?? Es profesor de Biotecnolo­gía en la Universida­d Politécnic­a de Valencia. Por estos días está en la Argentina presentand­o su nuevo libro “Comer sin miedo”.
José Miguel Mulet Doctor en Bioquímica y en Biología Molecular Es profesor de Biotecnolo­gía en la Universida­d Politécnic­a de Valencia. Por estos días está en la Argentina presentand­o su nuevo libro “Comer sin miedo”.

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