EE.UU. bombardea por primera vez a los rebeldes de Yemen
Estados Unidos intervino oficialmente por primera vez en la guerra civil yemení destruyendo tres puestos de radar en una zona controlada por los rebeldes hutíes, en respuesta a varios ataques lanzados contra uno de sus barcos destructores desde territorio hutí.
Según informó el Pentágono, la respuesta del Ejército estadounidense tuvo lugar tras un segundo ataque fallido lanzado desde territorio hutí contra el barco destructor estadounidense USS Manson, que se encuentra en el Mar Rojo. En ninguno de los dos ataques contra el barco estadounidense se registraron daños personales ni materiales.
“Estados Unidos responderá a cualquier otro ataque contra nuestros barcos y tráfico comercial (...) y seguirá manteniendo nuestra libertad de navegación en el Mar Rojo”, afirmó el Departamento de Defensa estadounidense en un comunicado.
Los rebeldes hutíes yemeníes, apoyados por Irán, luchan contra el Gobierno del presidente Abed Rabbo Hadi, respaldado por Arabia Saudita y Estados Unidos.
Sin embargo, los rebeldes hutíes rechazaron haber atacado el barco estadounidense. “El Ejército yemení y los Comités Populares (una milicia rebelde) están completamente listos para cooperar con cualquier cuerpo de Naciones Unidas o internacional para investigar esas alegaciones”, dijo Sharaf Luqman, portavoz de las fuerzas del Ejército pro-rebeldes.
Además, condenó el bombardeo de puestos de radar controlados por los hutíes. “Esta agresión estadounidense directa y tomar por objetivo las tierras yemeníes hoy en día es inaceptable”, añadió Luqman de acuerdo con la agencia Saba, controlada por los rebeldes yemeníes. Riad teme que el poder de los rebeldes shiíitas en Yemen dé a su rival regional Irán una mayor influencia en la península arábiga a las puertas de su país. Por eso, desde marzo de 2015 Arabia Saudita encabeza una coalición militar de países sunitas que bombardea por aire objetivos en Yemen, en los que no sólo alcanzaron posiciones hutíes, sino también instalaciones humanitarias, mercados o bodas, en los que murieron numerosos civiles.
El sábado, un ataque contra un velatorio en la capital del país, Saná, dejó unos 140 muertos. Arabia Saudita, que combate desde el aire a los rebeldes hutíes de Yemen, negó estar detrás de dicho ataque. Sin embargo, Riad controla el espacio aéreo sobre Saná y no se sabe de ningún otro Ejército que haya lanzado ataques allí.
Según afirmó Human Rights Watch, en ese bombardeo se utilizó al menos una bomba de fabricación estadounidense. HRW realizó esa afirmación tras la evaluación de fotos sobre los restos del arma encontrados en el lugar.