Buenos Aires ya tiene en Retiro un semáforo para “peatones tecnológicos”
Las luces están embutidas en la vereda para los que se distraen mirando la pantalla del celular.
Buenos Aires tiene desde ayer su primer semáforo para “peatones tecnológicos”. El Gobierno porteño puso en funcionamiento un sistema de luces embutidas en la vereda de Avenida del Libertador y Ramos Mejía, en Retiro, para la gente que tiene que cruzar pero se distrae con la pantalla de su celular.
Son cuatro series de luces LED sobre Libertador, que están sincronizadas con el semáforo co
mún. Cuando la luz está por cambiar, las lámparas comienzan a titilar y pasan de verde a rojo o viceversa. Así, se busca que los peatones que van mirando hacia abajo porque estén pendientes del teléfono no crucen en rojo.
Es un sistema que se empezó a probar hace poco en algunas ciudades europeas, como la holandesa Bodegraven-Reeuwijk o la alemana Augsburg. En marzo también se puso en marcha un sistema así en una esquina céntrica de Rosario.
Si funciona bien, los semáforos horizontales podrían instalarse en otras esquinas muy transitadas. De hecho, el legislador porte-
ño Marcelo Guouman, de Suma+, presentó un proyecto de ley para que el sistema se instale en distintos puntos de la Ciudad.
En los últimos años, a medida que los smartphones fueron ganando lugar, los peatones tecnológicos aumentaron y se convirtieron en un verdadero problema para la seguridad vial. Según un informe del Observatorio Vial Latinoamericano, un 13,8% de la gente cruza las esquinas sin mirar porque se distrajo con la pantalla o los auriculares.
La instalación de este sistema es parte de un trabajo general para ordenar todo el tránsito en esa esquina de Retiro, que es una de las más peligrosas de la Ciudad, dado que se mezclan miles de peatones con 30 líneas de colectivos y los autos particulares.
Uno de los cambio será la construcción de una dársena en el eje central
de Libertador, para que la gente pueda cruzar la avenida en dos tiempos. Hoy el semáforo cambia a los 30 segundos, y mucha gente no alcanza la otra vereda a tiempo.
También prolongarán las dársenas con las paradas de colectivos que quedan sobre Ramos Mejía y moverán la senda peatonal hacia la esquina: hoy está unos metros hacia el medio de la cuadra, pero mucha gente no la respeta y cruza por cualquier parte.
Por otra parte, eliminarán la ciclovía que hoy corre sobre Libertador y armarán una bicisenda sobre la vereda.