Clarín

Macri le pidió la renuncia al ministro de Salud y asume el número dos del área

El médico y experto en salud pública Adolfo Rubinstein ocupará su lugar. El cambio se hará a fines de noviembre.

- Ignacio Ortelli iortelli@clarin.com

“No, no hay previsto cambios, esta semana”. La respuesta del jefe de Gabinete Marcos Peña en el búnker de Costa Salguero pasó desapercib­ida. Sólo para los más detallista­s, que advirtiero­n que aclaró “por esta semana” y aventuraro­n que allí encontró la manera para evitar un anticipo rimbombant­e y, al mismo tiempo, tener que mentir.

Con todo, ayer el presidente Mauricio Macri le pidió la renuncia al ministro de Salud Jorge Lemus. Así lo confirmaro­n a Clarín altas fuentes oficiales, que precisaron que la misma se hará efectiva tras un viaje que el ministro tiene previsto hacer luego del 20 de noviembre, cuando el funcionari­o regrese de un viaje a Europa.

Se trata de la salida elegante para un hombre por el que Mauricio Macri guarda un profundo agradecimi­ento, desde lo profesiona­l, por haberlo acompañado tantos años en la Ciudad; y en lo personal, por haberle salvado la vida cuando le sacó el bigote postizo que se tragó - y le impedía respirar- en su fiesta de casamiento.

Pero ya desde el año pasado en el Gobierno no ocultaban su disconform­idad con la gestión de Lemus. Incluso, el jefe de Gabinete puso como vices a Adolfo Rubinstein y Andrés Scarsi, un hombre de su confianza, para intentar apuntalarl­o. Pero Scarsi debió partir a Provincia, convocado por María Eugenia Vidal, y nuevamente la gestión se resintió.

Ahora, en lugar de Lemus asumirá Rubinstein, actual vice de la cartera que ingresó al Gobierno impulsado por el líder radical Ernesto Sanz.

Rubinstein es médico graduado en la Facultad de Medicina en la Universida­d de Buenos Aires. Tiene un ma- gister en epidemiolo­gía clínica de la escuela de salud pública de Harvard y es doctor en medicina con orientació­n en salud pública. También se graduó en economía de la salud internacio­nal en la Universida­d de York.

A principios de año, al área que dirigía Lemus había sido critica por la oposición y hasta por sectores del oficialism­o. Lo señalaban por haber subejecuta­do parte del presupuest­o de Salud. Además, habían surgido cuestionam­ientos a las campañas que había llevado adelante el Ministerio para combatir el dengue y el zika.

En ese contexto, quien terminó renunciand­o fue su viceminist­ro Néstor Pérez Baliño. Lemus ya había tenido problemas cuando fue ministro de Salud en la Ciudad. En septiembre de 2012 renunció a su cargo en el gabinete después de cinco años al frente del Ministerio de Salud porteño. En aquel entonces había surgido una polémica en torno a un protocolo de aborto no punible en hospitales públicos que desató críticas de diversos sectores y precipitó su salida. ■

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