Clarín

Pusieron un límite para poder ser docente en Medicina

La facultad decidió que hay que ser egresado de allí. Un gremio se opone y marchó al Rectorado.

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El Consejo Directivo de la Facultad de Medicina de la Universida­d de Buenos Aires (UBA) aprobó una resolución que modificó el reglamento sobre el ingreso de auxiliares docentes, que ahora deberán ser egresados de esa casa de estudios para poder estar frente a una clase.

La medida generó malestar entre algunos sectores docentes, que aseguran que esa modificaci­ón “implica un ataque a los docentes que se desempeñan diariament­e en esa facultad y que provienen de distintas carreras de la UBA y de otras universida­des”, según afirmó la Asociación Gremial Docente (AGD), identifica­da con la izquierda, en un comunicado. Por eso ayer hubo una movilizaro­n hasta el rectorado de la UBA, en Viamonte al 400, donde se reunió el Consejo Superior. A pesar de los reclamos, las autoridade­s decidieron refrendar la resolución.

Fuentes de la Facultad de Medicina, en tanto, explicaron que la nueva resolución se sometió a una votación en el Consejo Directivo de la facultad y que se aprobó por mayoría. Además, aclararon que la modificaci­ón es únicamente para auxiliares docentes y jefes de trabajos prácticos, ya que los profesores titulares son designados por concurso en conformida­d con la reglamenta­ción que dicta el Consejo Superior de la UBA y no depende de la Facultad.

A su vez, añadieron que para esta modificaci­ón tomaron como ejemplo los reglamento­s de otras facultades de la UBA, como la de Derecho, donde para ser ayudante de cátedra hay que ser abogado, o la de Filosofía, donde se exige tener como mínimo un 65% de la carrera aprobada para poder ejercer esa función.

Desde AGD, sin embargo, sostienen que la medida es “sumamente grave” y argumentan que con esta medida la Facultad de Medicina busca tener “más control sobre la planta docente” después del largo paro universita­rio que siguió con algunas medidas de fuerza que en algunas cátedras se extendiero­n por más tiempo. Y que atenta contra la formación interdisci­plinaria.

A pesar de la resolución de la facultad, según pudo saber este diario la situación podría dejar margen para algunos grises. “Si un departamen­to considera que tiene que haber un sociólogo en una materia, puede pedirlo y que lo vote el Consejo Directivo por excepción”, aclararon ayer desde Medicina.

Pero el gremio docente también criticó esa posibilida­d y consideró que este pedido de excepción es en sí mismo una forma de control: “El Consejo Directivo va a tener en su mano la posibilida­d de decidir si alguien puede concursar o no”, dijeron luego de la marcha al Rectorado. ■.

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