7 minutos: Internet marca un nuevo récord de tiempo para enamorarse
Relaciones. Una nueva plataforma online de “micro citas” en mesas virtuales invita a encontrar pareja con una velocidad inédita. Se suma a la moda de Tinder y Happn.
“Yo me quiero casar... ¿y usted?” fue un histórico programa de la TV que, potenciado por los inolvidables latiguillos de Roberto Galán, promovió desde la década del 70 el amor mediatizado. ¿Un antecedente de las apps de citas? El ciclo daba 45 minutos para que los participantes “se enamoraran” y se coronaba, claro, con el famoso “se ha formado una pareja”. En épocas de amor de apps - y del amor líquido del que habla Zygmunt Bauman- ese tiempo es una eternidad.
Ahora, una plataforma española de citas propone “Siete minutos para encontrar pareja”. ¿La ciencia puede explicar por qué se acortaron los tiempos para el amor? Sí, y hasta puede distinguir entre el levante virtual o el cara a cara. Tus7minutos.com se ins- pira en las sesiones de speed dating. En ellas cada participante se pone en contacto con varias personas en “microcitas” de entre 3 y 10 minutos en bares antes de que suene la campana y haya que conocer al próximo. La diferencia acá es que no hay ningún bar. “Solo hay que loguearse en una de las mesas virtuales y nosotros le ponemos en contacto con 10 participantes”, explicó Manuel Álvarez al diario El País de España. Los “requisitos” que pide Tus7minutos.com son edad y lugar de residencia, pero pagando 20 euros se podrá elegir color de pelo, ojos y hobbies.
Para el neurocientífico egipcio Fred Nour - que acaba de publicar en EE.UU. “Amor verdadero: cómo usar la ciencia para entender el amor”- esos primeros minutos son cruciales y pueden significar una primera fase del camino hacia el amor verdadero. “El amor no es irracional. Sí es inconsciente, pero tiene raíces físicas. Cuando se recibe un primer estímulo real se ingresa a la primera de las diferentes fases que conducen al amor verdadero”, explica. “La primera fase es la elección de un compañero: visión, oído y olor. Esto puede pasar en Internet. La segunda es el romance, donde se produce lo que todos sentimos cuando decimos que nos estamos enamorando. La tercera es el desenamoramiento, algo inevitable, que tiene un motivo y trae beneficios”, explica Nour.
Pero, ¿cómo no abandonar todo en esa tercera fase y volver a la aplicación a buscar otro candidato? “Si se mira con ojos objetivos al otro y se piensa que -aunque ya no tengan sexo en el pasillo- se hizo un buen trabajo al elegirlo, se abre el camino hacia la cuarta fase, que no es de roman- ce: es el amor verdadero, para toda la vida”, escribe Nour. De ahí viene la sensación de que “ahora el amor es más rápido”. De esa primera inspección visual, olfativa y auditiva que puede durar 7 minutos y que , como promociona la aplicación, sirve “para que elijas el compañero perfecto”.
“El amor no tiene nada que ver con el corazón, está todo en la mente”, dice el experto en psicofisiología Daniel López Rosetti. Entonces, si hay un tiempo para el levante, otro para el metejón y uno más para el amor verdadero, ¿también hay un reloj biológico que puede hacer que nos enamoremos menos a medida que envejecemos? “Sí, la ínsula cerebral se activa,se enciende con las emociones del amor y la atracción. La variación en su activación puede relacionarse más con las diferentes edades que con diferencias biológicas”, aclara.