La Nueva

Gran Cine Mitre

- Por Mario Minervino mminervino@lanueva.com

Hace 77 años, en agosto de 1940, se inauguró el Gran Cine Mitre, con la propuesta de exhibir “películas de selección” a precios populares.

A 11 años de inaugurado, el Teatro Rossini --Mitre 225-- recuperaba su esplendor, abriendo su remozada sala bajo el nombre de “Gran Cine Mitre”, y apostando a ofrecer buenas películas a precios populares.

El 3 de agosto, un cocktail realzó el acontecimi­ento y a las 21 se abrió la sala con tres películas argentinas: Doce mujeres (con Olinda Bozán), Puerta cerrada (Libertad Lamarque) y Huella (Enrique Muiño).

Un lleno completo dio clara muestra del entusiasmo ante la propuesta. Al segundo día comenzó el matiné “para todos los pibes” --a partir de las 14--, con una panzada de 4 filmes, incluida una de Los Tres Chiflados.

El Mitre salió a la palestra en un momento de furor del cine local. El Rialto, por caso, ofrecía Las aventuras de Buck Rogers y Los celos de Cándida, con Nini Marshall.

El Odeon --O’Higgins 46-- estrenaba Extraño cargamento, con (nada menos) Clark Gable y Joan Crawford. El Palacio de Cine conmovía con Tyron Power y Dorothy Malone en Apolo me llaman. El Astral --Brown 162-- presentaba La vida de Carlos Gardel, con Hugo del Carril y, por último, El Grand Splendid, el filme de Leopoldo Torre Ríos Los pagarés de Mendieta.

Pero sin dudas el impacto del Gran Cine Mitre radicaba en el valor de las entradas, con la platea a 25 centavos frente a los 75 y 95 de otras salas.

Más allá de la buena respuesta de público, el lugar funcionó menos de un año.

En septiembre de 1941 reabrió con el tradiciona­l nombre de “Teatro Rossini”, con el cual funcionó 50 años más. Cerró “por vacaciones” en febrero de 1991 para nunca más abrir.

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