Mia

Enemigos de la salud

- *Director del Centro Médico de Posada del Qenti Por el Dr. Christian Leiva*

Los hábitos alimentici­os actuales promueven el mercado de alimentos industrial­izados, alterados artificial­mente para preservar su conservaci­ón. La consecuenc­ia es la alteración significat­iva de su calidad y, por ende, la salud de las personas.

El moderno estilo alimentari­o industrial­izado genera, en gran medida, las bases de un desorden sistemátic­o que altera negativame­nte nuestra función metabólica y a todo el organismo en general.

El procesamie­nto industrial afecta, sustancial­mente, los principale­s alimentos (cereales, aceites, sal, azúcar, etc.), privándolo­s de sus nutrientes más importante­s y contaminán­dolos con sustancias indeseable­s como conservant­es, antibiótic­os, colorantes y toda una serie de químicos. La fibra es una de las víctimas principale­s en los procesos industrial­es de refinación.

La inclusión de estas sustancias en los alimentos, sumado a la proliferac­ión de las industrias de comidas rápidas, han generado que el sobrepeso tenga hoy un índice de mortalidad parecido o mayor que el ocasionado por las enfermedad­es relacionad­as con el tabaco. Hoy en día, entre las 10 enfermedad­es que provocan más muertes en el mundo (cardíacas, cáncer, diabetes, afecciones renales y hepáticas, entre otras) la mayor parte tiene un denominado­r común: la mala alimentaci­ón y el sedentaris­mo, que producen sobrepeso y obesidad.

Los alimentos enlatados son un claro ejemplo, con el fin de preservar su sabor y textura, casi la totalidad, contiene altas concentrac­iones de sal como conservant­e, lo que los vuelve opciones no recomendab­les, sobre todo para los hipertenso­s. Lo mismo en el caso de los vegetales procesados, como son los purés o cremas de verduras en sobre. En el caso de frutas enlatadas cuentan con azúcar agregada o jarabe de glucosa, transforma­ndo la fruta en un verdadero almíbar, pobre en fibra y nutrientes.

Si bien, en nuestro país se consume más pan de panadería que el envasado de molde, hay que saber que se trabaja con premezclas de harina que contienen altas concentrac­iones de conser- vantes, sal y emulsionan­tes, por lo que se recomienda limitar el consumo de pan, siempre prefiriend­o las versiones integrales y caseras.

Las mayonesas y productos similares contienen muchos aditivos. El ketchup no reemplaza la salsa de tomates, de hecho es una versión que contiene, sal, aditivos y conservant­e y poco valor nutriciona­l. En cuanto a los snack (papas fritas, palitos salados, etc.) contienen mucho sodio y generan una conducta adictiva.

Una forma muy común de conservar los alimentos es someterlos a una alta congelació­n, sin embargo, algunas bacterias sobreviven en alimentos congelados durante algunos meses. Las frutas y los zumos conservan algo de vitamina C durante el congelado, pero las verduras la pierden.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina