Vacaciones ¿para qué?
Sin duda, no son un privilegio sino una necesidad. Tomarse períodos de descanso anuales debería ser obligatorio porque es la única manera de poner fin a una rutina, comenzar otra para luego regresar a la actividad plena. Por eso, es bueno reflexionar sobre para qué nos vamos de vacaciones porque comer todo el día no está dentro de ningún plan antiestrés. Muy por el contrario, resuelta poco saludable para todos y todo porque, incluso, afecta la economía familiar. Tomar por asalto los snacks de la playa, saturarnos de grasas y fritos no es ninguna buena idea. Ustedes dirán que cocinar a la noche tampoco, pero si lo hacemos después de un día de mar y sol, no está mal. ¿Qué tal si probamos este verano comer en la playa casero, saludable y light?
El equipo de Mia