Ola de arrestos de opositores en rusia en el cumpleaños de Putin
A cinco meses de las elecciones, hubo marchas en 80 ciudades de todo el país en apoyo al bloguero alexei Navalny, encarcelado.
Ex ministro de Desarrollo Internacional, Shapps sostuvo que una treintena de diputados del partido formaron un grupo para reclamar la marcha de May y la elección de un nuevo líder.
“Creo, al igual que algunos de mis colegas, que es hora de abordar el problema del liderazgo”, dijo Shapps. “Ya no se puede seguir así. Ha llegado el momento de organizar una nueva elección de nuestros dirigentes o al menos de preparar un calendario”, añadió. Shapps hizo estas declaraciones dos días después del desastroso discurso de Theresa May, pronunciado al cierre del congreso del Partido Conservador en Manchester.
La jefa del gobierno, perturbada por recurrentes ataques de tos, se expresó con dificultad tras haber sido interrumpida por un manifestante que fue a darle un formulario de despido “de parte de Boris Johnson”.
La figura de May suscita críticas en el seno de su partido desde que convocó a las elecciones anticipadas, en junio, en las que los conservadores perdieron la mayoría absoluta.
“Debemos abordar el problema del liderazgo”, dijo el ex titular del partido
Más de 200 simpatizantes del opositor ruso A lexei Navalny, actualmente encarcelado, fueron detenidos ayer en manifestaciones organizadas contra Vladimir Putin, que celebraba su 65º cumpleaños.
Tanto la mov ili zación como la respuesta policial fueron inferiores a las manifestaciones de primavera, cuando decenas de miles de personas salieron a la calle, jóvenes en su mayoría. Con todo, fue un desafío directo al presidente ruso el día de su cumpleaños.
Navalny, de 41 años, un popular bloguero anticorrupción, instó a sus seguidores a salir a las calles tras haber sido condenado a veinte días de arresto por haber convocado manifestaciones no autorizadas, su tercera instancia en prisión en lo que va del año.
Se llevaron a cabo marchas en ochenta ciudades de todo el país, del Extremo Oriente hasta el Báltico, incluyendo Moscú. Pero la mayor manifestación tuvo lugar en San Petersburgo, segunda ciudad del país y tierra natal de Putin, donde se concentraron tres mil personas.
“¡Putin es un ladrón! ¡Libertad para Navalny!”, gritaban los manifestantes, congregados en la Plaza de la Insurrección, en pleno centro de San Petersburgo, frente a las fuerzas especia- les desplegadas en el lugar.
En Moscú, un millar de personas se reunieron en el centro, bajo la lluvia. Se tomaron importantes medidas de seguridad, aunque las fuerzas antidisturbios apenas intervinieron, en contraste con la marcha de junio, que incluyó unos mil arrestos y una violenta represión policial.
También en varias ciudades del interior hubo enfrentamientos entre la policía y los manifestantes, como Ekaterimburgo, junto a los Urales, y Yaroslavl. En algunos lugares, como Nishni Novgorod y Ufa, los actos terminaron pacíficamente.
El noticiero de la cadena pública Rossia-24 no informó sobre las marchas, y dedicó tiempo en cambio a las felicitaciones para el presidente ruso de parte de dirigentes extranjeros por su cumpleaños. Posibilidades. Aunque en estos últimos meses se ha impuesto como el principal opositor al Kremlin, Alexei Navalny tiene pocas posibilidades de poder presentarse a las elecciones, previstas para dentro de cinco meses.
La comisión electoral central consideró en junio que no era apto para presentarse a las elecciones presidenciales, a causa de una condena por malversación de fondos que data de febrero de 2017.
Navalny, que denuncia la corrupción de las élites desde hace años, multiplicó en estas últimas semanas sus reuniones para intentar ampliar su base electoral, y había previsto mantener una ayer en San Petersburgo, antes de ser detenido el lunes
Vladimir Putin, en el poder desde fines de 1999, todavía no se ha declarado oficialmente candidato, aunque en Rusia nadie duda de que se presentará para ser reelegido.