Un recambio positivo y desafiante para el país
La multiculturalidad y las mayores oportunidades que encuentran los jóvenes son dos fuerzas muy potentes de este nuevo Chile.
Tal como da cuenta la presente edición especial que La Tercera ofrece a sus lectores, ha sido evidente que el país está experimentando un conjunto de profundas transformaciones, que con razón permiten hablar de un “recambio” en varios aspectos. Posiblemente lo vertiginoso del fenómeno impide a veces apreciarlo en su real perspectiva, y no pocas veces se interprete como un signo de conflicto social, sin advertir que la morfología que va tomando el nuevo Chile nos habla, en cambio, de un país culturalmente más diverso y con nuevas oportunidades para nuestro desarrollo.
Sería equivocado idealizar esta nueva etapa, y por contraste demonizar tanto lo actual como lo previo; cada momento de la historia tiene sus propias luces y sombras, pero no cabe duda de que si los grandes temas de hoy son la inclusión, la diversidad y una sociedad que reclama más derechos, es porque flagelos como la pobreza extrema, la desnutrición, alta mortandad infantil y escasa cobertura educacional han sido superados, gracias a las políticas sociales y pro crecimiento aplicadas en las últimas décadas. Así, aun cuando la desigualdad sigue existiendo, es mucho menos acentuada en las generaciones jóvenes. Tal como ha quedado demostrado estos últimos años, el crecimiento no está asegurado y por lo mismo cada administración debe procurar sostenerlo; sin ese pilar, el resto de la estructura social inevitablemente se resiente.
Pero probablemente donde más evidente se ha manifestado este nuevo Chile es en su multiculturalidad, donde llama la atención la inusitada fuerza con que se ha hecho presente. Al ser Chile un país abierto y conectado al resto del mundo, debates como el matrimonio igualitario -ampliamente respaldado en el segmento menor a 30 años-, la legalización de drogas, los derechos de la mujer, el respeto por el medio ambiente y tantos otros temas antes ajenos en nuestra discusión ahora adquieren notorio protagonismo. A ello también ha contribuido la inmigración; apenas en algunos años el número de extranjeros se ha duplicado, lo que junto con la riqueza que ello implica, también presenta el desafío de contar con una nueva política migratoria que canalice positivamente este flujo. El interés por asentarse en nuestro país es también reflejo de los atractivos que muchos extranjeros ven en Chile, lo que resulta elocuente a la luz de los testimonios recogidos en esta edición especial.
Hay también una nueva mentalidad en los más jóvenes, mucho más ganadora y sin los complejos de inferioridad que parecieron caracterizarnos. La generación de nuevos deportistas -para quienes los límites no parecen existir- dan cuenta de este ímpetu, que debería ser fomentado con políticas que permitan canalizar este talento de clase mundial.
Quizás donde aún se observa mayor rezago es en el enfoque de las políticas educacionales. En esta edición se da cuenta de que fenómenos como la automatización cambiarán de manera radical -y en muy poco tiempo- el mercado laboral, lo que hace indispensable dotar a los más jóvenes de nuevas competencias. Lamentablemente la reforma educacional en curso va en otra dirección, lo que hace necesario una reorientación hacia el siglo XXI.
Fiscal general de EE.UU. se convierte en nueva víctima de ataques mediáticos de Trump
Las continuas críticas de Donald Trump y sus asesores en lo que para muchos se ha convertido en una guerra de desgaste contra el fiscal general Jeff Sessions, en medio de la investigación por los vínculos de la administración con Rusia, han levantado suposiciones de una eventual destitución.
The Guardian. T. Timm, Reino Unido | 26.07.2017
Sessions está ejerciendo más poder sobre millones de estadounidenses que cualquier otro miembro del gabinete de Trump, y es un desastre absoluto para los derechos y las libertades civiles y la reforma de la justicia penal. Si Trump quiere despedirlo, que lo haga (...). Es difícil imaginar que alguien podría hacer más daño en esa posición que Sessions.
CNN. Jill Filipovic, EE.UU. | 25.07.2017
Trump no puede despedir a Sessions, no sin crear un escándalo nacional. En su lugar, aparentemente ha decidido reprender públicamente y humillar al fiscal hasta que dimita. Es un espectáculo deprimente. Pero los liberales no deben derramar lágrimas por Sessions.
New York Times. Ross Douthat, EE.UU. | 26.07.17
Se puede ser tan leal como Jeff Sessions y aun así sufrir las consecuencias de una verdad simple e ineludible: Este presidente no debe ser el presidente, y cuanto antes no lo sea, mejor.