María Juliana Ruiz

“Quiero aportar y contribuir con mi experiencia a que tengamos resultados

favorables en la agenda social”. FUCSIA - ¿A qué mujer admira en la política?

MARÍA JULIANA RUIZ: Admiro a todas las que se han consolidado como líderes, que han puesto su capacidad intelectual y emocional al servicio de la sociedad. Aquellas que han desconocido las barreras de género y, de una manera valiente, han alcanzado posiciones desde las que impactan en la comunidad, con valores y principios. Si tuviera que decidirme por una, destacaría a Malala Yousafzai, por su gran determinación a tan corta edad.

- ¿Cómo define el rol de la primera dama en la historia?

M. J. R.: Se ha vuelto cada vez más visible, en la medida en que la mujer ha conquistado nuevos escenarios de participación y de toma de decisiones. Además de asumir el reto de mantener la unidad familiar, respaldar como pareja a su esposo y al mismo tiempo liderar propuestas de Gobierno de orden comunitario y benéfico.

- ¿A qué le teme?

M. J. R.: Todos los seres humanos tenemos miedos que se van manifestando circunstancialmente. Le temo a la enfermedad, a la ausencia.

- Desde su profesión, ¿qué quiere hacer como primera dama?

M. J. R.: He liderado proyectos de impacto social. Me he desempeñado en el ámbito internacional y tengo

María Juliana se casó con Iván

Duque el 15 de febrero de 2003 en La Calera.

una sensibilidad especial hacia el trabajo orientado al servicio.

- ¿Detrás de un gran hombre siempre hay una gran mujer?

M. J. R.: Hacemos muy buen equipo. Durante los últimos 15 años hemos trabajado unidos para sacar adelante nuestros sueños. Tenemos una maravillosa familia y cada uno ha logrado desarrollarse profesional y personalmente con satisfacción. Cuando Iván decidió dedicarse de manera definitiva a la política le dije que mi mejor manera de apoyarlo sería atendiendo eso de lo que nadie más se iba a encargar: su familia y el bienestar de su hogar. Estaré siempre a su lado, cuando me necesite.

- ¿Qué admira de su esposo como hombre?

M. J. R.: Iván es un ser humano como pocos y un muy buen papá. Admiro la seguridad y la tranquilidad que me inspira, su sentido del humor. Es alguien en quien se puede confiar. Muy culto desde joven, aterrizado, analítico, amoroso y consciente de la importancia de los valores.

- ¿Y como político?

M. J. R.: Admiro su compromiso por Colombia. Su decisión permanente por buscar soluciones y alternativas frente a las necesidades de los demás. Es un líder por naturaleza, inquieto intelectualmente, innovador y equilibrado. Todo esto lo presenta como una persona con el carácter y los principios necesarios para ejercer una nueva forma de hacer política.

- ¿Cómo se logra la paz en Colombia?

M. J. R.: Coincido con Iván en que se logra con justicia, verdad y reparación. La paz debe comenzar en casa, con ejemplo, disciplina y respeto. Para construir una cultura y una conciencia de paz son fundamentales las herramientas adecuadas en la educación y es indispensable el concepto de solidaridad.

- ¿Cómo ve a sus hijos viviendo en la Casa de Nariño?

M. J. R.: Los veo como lo que son: niños. Requerirá, como todo, un proceso de adaptación. Nuestros hijos son pequeños y aún gozan del privilegio de la sencillez y la imaginación al servicio de sus sueños.

- ¿A qué ha renunciado para apoyar la carrera política de su esposo?

M. J. R.: A un proyecto de vida familiar diferente; somos muy unidos y la presencia de Iván se ha reducido significativamente. Pero estamos convencidos de que es un hombre dedicado y honesto, con el deseo de entregar sus capacidades al servicio de un país que adoramos.

- Algo de su vida privada que no negocia.

M. J. R.: ¡Ah! No lo voy a contar porque deja de ser privado (risas). Pero puedo decir que soy respetuosa de la intimidad y reticente a la exposición pública de mis hijos.

- ¿Le gusta la moda?, ¿a cuáles diseñadores admira o prefiere?

M. J. R.: Me gusta, pero no necesariamente estoy a la moda. Soy feliz con una chaqueta de diseñador o con una de un almacén de cadena. Prefiero hablar de estilo. Y en cuanto a creadores, reconozco en los colombianos un talento bárbaro, de muy alto nivel y por eso los admiro.

- ¿Dónde está la felicidad? M. J. R.: En entender que no es un fin sino una decisión diaria. En vivir con gratitud. En mirar atrás y recordar con alegría. A mí me hacen feliz muchas cosas.

- Una afición. M. J. R.: Escribir.

- Un libro.

M. J. R.: Hay libros infantiles de una profundidad enorme que me encantan y hay novelas o libros históricos que son memorables. De escoger uno, diría que Rayuela, de Julio Cortázar.

- Una película.

M. J. R.: Le tengo amor al cine, así que es difícil escoger. Me encanta Almodóvar. Pero hay una recurrente: Leyendas de pasión.

- Una canción.

M. J. R.: La música me acompaña. Disfruto el jazz, la salsa, un buen bolero y me priva un vallenato.

- Un viaje.

M. J. R.: El que no se planea.

- Un reto. M. J. R.: La vida.