Vacunan a primera línea de las clínicas
En Cúcuta, los médicos, enfermeras y personal que labora en las unidades de cuidado intensivo de las clínicas Santa Ana, San José, Medical Duarte, Médico Quirúrgica y Norte empezaron a recibir desde ayer la vacuna de Pfizer/ Biontech contra la COVID-19, dosis correspondientes a un lote de 1.350 unidades enviadas por el Gobierno Nacional a la región. /
Un total de 1.350 vacunas Pfizer/ Biontech fueron entregadas a las clínicas de la ciudad para iniciar el proceso de vacunación del talento humano de salud que hace parte de la primera línea de atención.
El director del Instituto Departamental de Salud, Carlos Martínez, dijo que la entrega se hizo ayer muy temprano a la Secretaría de Salud de Cúcuta, que a su vez hizo la respectiva entrega a las clínicas, así: 384 dosis, clínica San José; 396, Médical Duarte; 276, Santa Ana; 96, Médico Quirúrgica y 186, clínica Norte.
Así mismo, fueron asignadas 12 dosis para la ESE Imsalud que corresponde a los vacunadores que van a hacer el proceso de vacunación de los adultos mayores de 80 años.
Para hoy
Para ayer estaba previsto que se iniciara la aplicación de las dosis de la vacuna Sinovac, producida en China, a los 159 abuelos de ochos Centros Vida priorizados, pero por algunos problemas de logística se aplazó para hoy.
La secretaria de Salud de Cúcuta, Rosa Emilda Vargas, explicó que hubo un inconveniente logístico que impidió iniciar el proceso como estaba previsto, pese a que el 1 de marzo se recibió de manos del IDS el producto, que quedó a disposición de Imsalud, entidad que será la encargada de inmunizar a los adultos mayores.
Precisó que el personal de la institución se encarga del apoyo logístico para el traslado entre el ultracongelador, que está en el laboratorio de Salud Pública del IDS y la IPS donde se llevará a cabo la vacunación, asegurándose que se mantenga la cadena de frío.
Conocer la base de datos
El gerente de Imsalud, Juan Agustín Ramírez, explicó que previamente enviaron a la Secretaría de Salud un oficio donde se informó que a la fecha no habían recibido bases de datos nominales de la población mayor de 80 años correspondiente al régimen subsidiado, contributivo y población pobre no asegurada.
“Se les dijo que se recibían los biológicos con dos condiciones, primero la entrega de la base de datos de los abuelos para poder agendar, responsabilidad que recae en el IDS, la Secretaría de Salud y las EPS. La segunda condición es que no se puede seguir exponiendo a una infección al recurso humano, que por ser de primera línea de atención tiene que ser vacunado”, señaló.
En cada punto de vacunación hay cinco personas, una auxiliar de enfermería que hace la admisión del abuelo y su acudiente que debe firmar un consentimiento informado. De allí pasa a la sala de espera donde lo llama la auxiliar de enfermería para vacunarlo y luego pasa a una sala provisional de urgencia donde una enfermera profesional estará pendiente de cualquier reacción alérgica severa, y donde una digitadora toma todos los datos del paciente para montar al sistema a fin de que el Gobierno reconozca el servicio.
“Con la participación de la comunidad en los procesos de inmunización y el autocuidado se cumplirán las metas del Gobierno nacional”, Carlos Martínez, director del IDS