Un ‘sismo’ en los proyectos del Biess
El banco tiene vacíos en los fideicomisos inmobiliarios ❚ Hay viviendas inconclusas
El banco más grande del Estado tiene ‘trapos sucios’. La administración de los fideicomisos inmobiliarios del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess) deja ver irregularidades, procesos incompletos, informalidades y obras a medio terminar.
Los departamentos encargados de precautelar el manejo adecuado de los fideicomisos no revisaron la documentación ni cuidaron los datos para auditorías futuras. Las falencias dificultan los trabajos de orden y control en las inversiones de la entidad, que se nutre de los recursos que entregan mensualmente los afiliados al IESS.
La Contraloría General del Estado examinó los fideicomisos inmobiliarios del Biess constituidos desde 2012 hasta 2017 y encontró, por ejemplo, que se dejaron proyectos habitacionales inconclusos en Manabí.
El informe borrador, leído el 18 de octubre, evidencia que el proyecto Urbanización Jaime Roldós, en Manta, sufrió afectaciones menores durante el terremoto del 16 de abril de 2016. La obra no contaba con seguro contra todo tipo de daños.
Planman, empresa constructora del proyecto inmobiliario, reconoció que fue su error no asegurar la construcción y ofreció pagar por las reparaciones. El monto superaba los 706.000 dólares, pero hasta la fecha no se paga por los arreglos.
El resultado es que la solución habitacional no puede ser ocupada pese a la demanda de viviendas que hay en el país y especialmente en Manabí.
En Guayas también hay anomalías, según el documento preliminar que redactó la Contraloría. El proyecto inmobiliario Oporto tiene menos de 40 viviendas entregadas en la primera etapa de construcción, pese a que fue adjudicado en 2012. El plan original contemplaba la edificación de 853 hogares.
La demora, pese a las prórrogas autorizadas por el banco del afiliado, no es el único problema. En la obra, hasta el cierre de la investigación de la Contraloría, no existía una planta de tratamiento de aguas servidas ni se implementaron todos los servicios básicos. Además, no se encontraron los estudios de impacto ambiental ni los permisos de construcción.
Estudios externos determinaron que el proyecto tampoco contaba con diseños atractivos para facilitar su comercialización.
Los puntos negativos del proyecto inconcluso se agravan porque, de acuerdo con el informe, ya se han desembolsado más de nueve millones de dólares. En los archivos del Biess no se encontraron los justificativos para ese pago.
La empresa responsable del proyecto, Navia Casanova Casas & Edificios, presentó, ante la Contraloría, los respaldos para justificar esos cobros y su documentación para explicar los problemas para concretar la obra.
Las observaciones se extienden a más proyectos de vivienda. Según el documento, cerca de la mitad de los fideicomisos no cuentan con una auditoría externa independiente.
Uno de los temas más preocupantes fue la falta de permisos de construcción de los fideicomisos aprobados por el banco. Tres fideicomisos no estaban inscritos en el mercado de valores, lo cual es un paso obligatorio.
La respuesta del banco del IESS al ente de control fue que, en 2013, el Directorio del Biess hizo reformas al manual orgánico funcional de la entidad y eso ocasionó problemas para el control y manejo de las operaciones. En otros casos, ni siquiera existió un reglamento operativo para 13 fideicomisos. Actualmente, el Biess tiene registrados 30 fideicomisos inmobiliarios en su página web.
Diario EXPRESO consultó con el banco del seguro social, pero hasta el cierre de esta edición no tuvo respuesta.
EL DETALLE Concepto. El fideicomiso inmobiliario permite desarrollar emprendimientos con fondos de terceros. El Biess, por ejemplo.