Repatrian los restos de tercer hondureño fallecido
Los restos mortales del hondureño Henry Adalid Díaz Reyes fueron repatriados anoche por la vía del aeropuerto Toncontín bajo un marco triste, de llanto y dolor de familiares y amigos que llegaron a la terminal aérea.
Díaz Reyes, de 26 años, murió el domingo en la frontera de Guatemala con México víctima de un disparo de bala “de goma”
en la cabeza supuestamente de manos de policías mexicanos en el momento en que se enfrentaban con la caravana de emigrantes que quería ingresar a aquel país. La repatriación del tercer cuerpo de un hondureño que formaba parte del grupo que busca el “sueño americano” fue posible gracias a la coordinación de la Cancillería con su par de México.
El joven originario de la capital, y que en su momento laboró como ayudante de bus de la ruta urbana, había expresado a sus familiares vía teléfono que “solo muerto regreso a Honduras”.
La madre del joven, Maribel Reyes, relató que su vástago decidió acompañar la caravana porque en Honduras había sido amenazado por pandilleros.
Antes de partir, el hondureño se tatuó el nombre de su madre en el pecho para “llevarla en el corazón”, según contó su tía Leticia Reyes