Sin visitantes y con Marcelo Gallardo lejos de la Boca...
El superclásico argentino Boca-river por la final de la Copa Libertadores 2018 se jugará sin hinchas visitantes para evitar violencia y con el suspendido DT millonario, Marcelo Gallardo, fuera del Estadio La Bombonera, sede del primer juego el sábado.
“No me quiero hacer cargo de una muerte”, dijo el presidente del club de la banda roja, Rodolfo D’onofrio; hace pocas horas, sin ir más lejos, asesinaron a balazos a un hincha después del partido Unión-patronato (2-2) por la Superliga de Primera División. Es la cuarta muerte en el actual año y la número 137 en los últimos 20, según datos de la ONG Salvamos al Fútbol.
adiós, Muñeco
Mientras tanto, el comité disciplinario de la Conmebol comunicó el sábado su decisión de “rechazar el reclamo presentado por Gremio” de Brasil. Se confirmó el resultado 2-1 a favor de River en el juego de vuelta en Porto Alegre.
“Recibo esta noticia con enorme decepción, por no decir una sospecha de que la Conmebol ni contempló castigar a River Plate”, reaccionó el titular de Gremio, Romildo Bolzan.
Cuando River perdía 1-0 Gallardo pasó instrucciones por handy a su asistente Matías Biscay y en el entretiempo bajó del palco a los vestuarios y arengó a los futbolistas; lo tenía prohibido porque un jugador suyo tardó en regresar al campo de juego para el segundo tiempo en el Monumental. “Cuando se actúa con el corazón a veces se pierde la razón. Si fue un acto de indisciplina pido disculpas, no tuvo nada que ver con una postura desafiante de mi parte”, admitió el DT.
La Conmebol lo suspendió con cuatro fechas, aplicó una multa de 50 mil dólares al club y al DT le prohibió entrar al estadio en el primer partido. En la revancha podrá ir a un palco del Estadio Monumental, pero le advirtió que si reincide la pena será con agravante