El Economista (México) - Termómetro Económico
El fantasma de bancarrota amenaza a Toys R Us
LA CADENA de tiendas de juguetes y sus asesores de saneamiento están considerando acogerse a la protección del Capítulo 11 en el Tribunal de Bancarrota estadounidense y para ello han contratado al banco de inversión Lazard.
Toys R Us arrastra una deuda de aproximadamente unos 5,000 millones de dólares, de los cuales tiene un pago urgente de unos 400 millones.
La decisión de Toys R Us de declararse en bancarrota llegaría a pocas semanas del inicio de la tem- porada comercial navideña, la más importante del año para el sector minorista.
El ajuste del negocio de la juguetera estadounidense se produce en pleno auge del comercio minorista online, con el gigante Amazon a la cabeza, que han provocado una fuerte disrupción en el sector.
Durante este año ha habido más de una docena de quiebras significativas de minoristas, pero ninguna de la envergadura de Toys R Us, que posee más de 1,600 tiendas distribuidas por todo el mundo.
NERVIOSISMO
El anuncio de la petición de banca- rrota hizo que ayer cayeran fuertemente las acciones de las empresas jugueteras en la Bolsa de Nueva York.
Por ejemplo, los títulos de Hasbro cayeron 1.69%, a 93.24 dólares, mientras que las de Mattel descendieron 6.24%, a 14.87 dólares cada una.
Por su parte, los títulos de Jakk Pacific, empresa juguetera californiana, fueron los que más cayeron, con una pérdida de 8.20%, a 2.80 dólares por unidad.
Los tres dueños de la cadena, los fondos de capital privado Kohlberg Kravis Roberts y Bain Capital Partners, y el fondo de bienes raíces Vornado Realty Trust, compraron a la compañía en el 2005 por 6,600 millones de dólares y la deslistaron de Bolsa.
La protección del Capítulo 11 le permitirá a Toys R Us reestructurar su deuda de 400 millones de dólares que se vence en el 2018 y negociar el resto.
La crisis por la deuda llega en un momento crítico para la empresa. El año pasado, 40% de sus ventas se realizaron en el cuarto trimestre, gracias a la temporada navideña.
Los jugueteros se muestran nerviosos y dudan sobre la capacidad de la empresa de pagar sus deudas, lo cual podría llevar a un menor inventario para fin de año.
Toys R Us también ha batallado con un incremento en la competencia de ventas en línea.