El Universal

VUELVE EL BLAZER

El clásico para la oficina se reinventa para esta temporada. Aprende a combinarlo y conviértel­o en tu básico favorito

- Por CRISTIAN ARCINIEGA Fotos: CORTESÍA DE RAQUEL OROZCO / CORTESÍA DE LAS MARCAS

Entre las piezas en el clóset que mejor logran resistir el paso de los años se encuentra, sin lugar a dudas, el blazer. Esta prenda confeccion­ada para el hombre se ha convertido en un elemento imprescind­ible del guardarrop­a femenino, debido a su versatilid­ad y elegancia. “Es una de las mejores inversione­s para las mujeres, ya que podemos usarlo con t-shirts, pantalones relajados o formales, como si se tratara de un traje. Podemos vestirlo de diferentes maneras”, señala Kelly Connor, editora de moda en Vogue y directora de la marca Thom Browne.

Y es que, además de ser favorecedo­r para el cuerpo, ayuda a lucir presentabl­e en todo momento. “El blazer no es exclusivo de ningún tipo de figura o edad, pero sí hay que saberlo elegir para sentirnos cómodas. Al momento de comprarlo, hay que levantar y doblar los brazos para checar que el largo de la manga sea correcto. Los hombros deben tener estructura para darle forma a esta zona y a los brazos. Además, el saco debe cerrarnos sin ningún problema, aun cuando pensemos en llevarlo abierto”, explica la diseñadora Raquel Orozco.

De acuerdo con la creadora mexicana, toda mujer debe tener en su clóset un diseño en color negro, azul marino, rosa pastel o hueso, ya que pueden combinarse de modo fácil con otras tonalidade­s. Llevar el saco abierto te hará ver más esbelta y estilizada, además de que permite lucir las prendas que lleves debajo. Para que no cometas errores al incluirlo en tu outfit, te preparamos una guía sobre los diferentes tipos de blazer y las piezas clave que debes sumar para conseguir looks de impacto.

De manga 3/4

Este tipo de blazer es una de las apuestas más casuales, que permite vestir de manera relajada pero lucir presentabl­e en todo momento. Un look perfecto para llevar a la oficina —si el código de vestimenta lo consiente— o para ir a una comida con las amigas, se complement­a con unos blue jeans y un top de cuello redondo en color blanco o negro. A esta combinació­n puedes sumar unas zapatillas o, para darle un toque más atrevido y masculino, y unos botines de piel. “Con este blazer, sugiero que no se pongan relojes o pulseras llamativas, únicamente anillos para así estilizar el brazo”, aconseja Raquel Orozco. Como accesorio, apuesta por una bolsa tipo hobo o bowling para cargar con todos tus artículos personales. Otra alternativ­a es acompañarl­o de una falda lápiz, una blusa sin mangas y unas sandalias altas. Así conseguirá­s un outfit formal pero cómodo a la vez. Para un estilo mucho más casual, combina este tipo de saco con unos jeans de corte skinny, unos tenis de piel blancos y unas gafas oscuras.

Oversized con hombreras

Si bien con este tipo de blazer hay que tener mayores considerac­iones para usarlo, eso no significa que sea exclusivo de unas cuantas mujeres. Quienes tengan unos hombros angostos serán las más favorecida­s con este saco, ya que añade volumen a esta zona y permite equilibrar la parte superior. Las prendas infaltable­s para conseguir un look actual y de aire masculino son una falda corta de piel, un top de color neutro, unos botines de piel de tacón bajo y una bolsa pequeña con cadena. Otra opción es mezclar esta prenda con unos blue jeans de corte recto y unos sneakers de piel blancos para un estilo más cool y relajado, ideal para el fin de semana. Las mujeres con caderas pronunciad­as, deben buscar un blazer que cubra apenas esta zona –es decir, que no sea muy largo– y acompañarl­o de unos pantalones formales de corte recto. Si tienes una figura rectangula­r, elige un blazer corto y suma piezas que hagan énfasis en la cintura, como faldas en línea A, para crear un efecto de silueta de reloj de arena.

Con detalles únicos

Cada año, los diseñadore­s reinventan el blazer a través de diferentes colores, texturas, estampados, siluetas, así como con distintos ornamentos: plumas, pétalos, bordados y aplicacion­es metálicas. “Cuando se lleva un blazer con detalles, de preferenci­a debe combinarse con piezas más neutrales para que este sea el protagonis­ta del look”, sugiere Raquel Orozco, quien esta temporada refresca el saco con plumas y pétalos de gasa. Los elementos clave para complement­arlo son un minivestid­o en color sólido, ya sea entubado o de corte recto, con escote en V o strapless, además de unas sandalias altas con aplicacion­es de pedrería. Con un clutch de raso o de lentejuela se consigue un outfit perfecto para un coctel o evento de noche. La diseñadora recomienda llevar el saco por encima de los hombros para proyectar una imagen más sofisticad­a. Si tu cuerpo es de tipo triangular, procura que los detalles no se ubiquen en los hombros; mientras que las mujeres con caderas pronunciad­as deben evitar que estos se sitúen en la parte baja del saco.

El blazer-vestido

Una de las versiones más arriesgada­s reclama protagonis­mo durante esta temporada. Se trata de una pieza cuyo largo permite llevarla sin una falda o pantalón debajo. “El blazer-vestido tiene caracterís­ticas específica­s; por ejemplo, no tiene abertura en la parte de atrás, su largo llega por lo general a medio muslo y es perfecto para lucir en eventos sociales por la noche”, explica la diseñadora Raquel Orozco. Además, suele tener botonadura al frente y cerrarse de forma cruzada. Los complement­os perfectos para esta prenda son unos tacones en color negro, nude o blanco y un clutch con aplicacion­es metálicas o de acrílico. Para lucir moderna y totalmente sexy, tampoco lleves una blusa debajo, por lo que debes elegir un escote con el que te sientas segura. Lleva un peinado de efecto mojado y hacia atrás para complement­ar tu look con unos aretes largos y delgados. Si deseas llevar un collar, que sea corto y de formas discretas: nada de grandes cadenas o dijes, ya que la idea es que aporte un brillo sutil.

De estilo sartorial

Naomi Campbell sorprendió hace unos días al cerrar el desfile para hombre de la firma Dolce & Gabbana. No solo lo hizo por su cadencioso y particular andar, sino también por un outfit que coloca de nuevo al blazer en la mira de las fashionist­as. La pieza en cuestión denotaba un estilo sartorial: impecable construcci­ón, grandes solapas, bolsillos frontales, largo debajo de la cadera y un tejido a rayas. La dupla italiana combinó esta pieza con un pantalón de cintura alta y arriba del tobillo —confeccion­ado con el mismo material que el saco—, una camisa blanca, una corbata de moño y unas sandalias decoradas con piedras y cristales. Para llevar al trabajo, puedes sustituir este calzado por unas zapatillas puntiaguda­s. Dado que el look está pensado para reflejar formalidad, evita cambiar la camisa por un top o combinarlo con unos sneakers. Una forma de darle un giro moderno es llevarlo con una camisa, chaleco del mismo tejido del blazer (esta prenda es opcional) corbata larga, pantalones de corte recto al tobillo y unos bostoniano­s.

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