Condena el Cardenal la violencia que ha llegado a descuartizar cuerpos humanos; acuden miles al Corpus Christi
Con un mensaje para erradicar la violencia a través de la fe, alrededor de 5 mil fieles se congregaron ayer en la explanada del Templo Expiatorio para ser parte de la ceremonia de este año del Corpus Christi, que celebra la sangre y el cuerpo de Jesucristo; después tomaron las calles en una peregrinación que los llevó al centro tapatío y la Catedral.
Las pocas gotas de lluvia que amenazaron con arruinar la noche, desaparecieron a la par que el Cardenal de Guadalajara, Francisco Robles Ortega, ofrecía la homilía, como si fuera obra divina para que la celebración que se llevaba a cabo en la explanada del Expiatorio no se interrumpiera y pudiera continuar su camino.
Mientras la lluvia se alejaba, durante el sermón el purpurado llamaba a los fieles a ser luchadores de vida para extirpar así los males que atacan al mundo, y lamentó la violencia que se vive en el país. “Qué triste es enterarnos todas las mañanas (…) que se han encontrado tres, cinco, seis, siete cuerpos, unos descuartizados… qué triste es que la vida humana sea tan maltratada por los que hemos sido llamados a ser agentes de vida”, profesó.
Después de comulgar, los presentes se congregaron en la procesión. El grupo lleno de banderas, cánticos y alabanzas, avanzó hacia Plaza de la Liberación.
“Me llena de alegría mucho venir a esto, cada año vengo yo desde hace ocho años más o menos… pido por todo, la salud, la familia, y el mundo como está ahorita”, dice Alicia Chávez mientras camina lo más cerca que puede de Robles Ortega.
Una vez en el centro, el Arzobispado terminó la misa, dando la bendición a los congregados, para después dejar al santísimo dentro de la Catedral Metropolitana y reservarlo, acto que da fin a la ceremonia que anualmente se lleva a cabo en la ciudad.
El Corpus Christi celebra la solemnidad del cuerpo y sangre de Cristo, dos meses después del domingo de resurrección, conmemorando la institución de la eucaristía.
Realiza la tradicional procesión del Expiatorio a la Plaza de la Liberación, en el Centro