Familias de migrantes tendrán asesoría para aprovechar remesas
Ambas instituciones anuncian apoyos en créditos productivos y seguros por $380 millones; se beneficiará a poblaciones pobres de 13 entidades
El titular de la Secretaría de Hacienda, José Antonio Meade y el del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi), Virgilio Andrade, presentaron el Programa de Atención a las Microfinanzas Rurales (Patmir), que tiene el objetivo de promover a través de las remesas el ahorro y la creación de negocios en las comunidades del país.
El programa buscará que también se otorgue crédito productivo y para la vivienda, que en una primera etapa buscará impulsar 114 millones de esas remesas en ahorros, 228 millones en créditos y 38 millones en coberturas de seguros.
Andrade indicó que el instrumento incluirá financieramente al menos a 57 mil personas que habitan en lugares de alta y muy alta marginación, de los cuales 28 mil 500 serán mujeres y 5 mil 700 indígenas.
El anuncio que se dio en el marco del Día Internacional de las Remesas Familiares, refrendó el compromiso de las dos instituciones con los descendientes de migrantes para facilitar el pago del dinero enviado a México en las mejores condiciones.
Meade destacó que México es el cuarto país que más remesas recibe a escala global, después de China, India y Filipinas. “El corte de 2015 contra 2016 en envío de remesas es de 28 millones de dólares”.
El programa tendrá cobertura en 13 entidades federativas con alto grado migratorio: Aguascalientes, Colima, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, San Luis Potosí y Zacatecas. “La cobertura del proyecto corresponde a una tercera parte del territorio nacional, no obstante, representa 59 por ciento del total RÉCORD de las entidades federativas que reciben remesas”, indicó el titular de Bansefi.
Además dio a conocer que pagaron más de 10.9 mil millones de pesos por más de un millón de envíos de dinero en los primeros cinco meses de este 2017.
Andrade indicó que se canalizaron de manera importante remesas que provienen de Estados Unidos y en el año creció el movimiento de estas 10 por ciento y 21 por ciento en monto total, lo que implicó la intensificación del ingreso de los connacionales.
Durante 2016 las remesas crecieron a niveles similares a los observados antes de la crisis fi nanciera de 2008, debido al mayor empleo de migrantes en Estados Unidos, informó el Banco de México en el reporte del primer trimestre sobre las economías regionales.
En conferencia de prensa, el director general de Investigación Económica del Banxico, Daniel Chiquiar, comentó que “el año pasado en particular la tasa de desocupación de los migrantes mexicanos disminuyó a un ritmo más rápido que la de los nacidos en EU”.
El volumen de remesas creció de forma general en México. Al medirlo por zonas destacó el centro que creció 33.4 por ciento; la zona centro norte, 35.1, mientras que el norte y el sur solo captaron 13 y 18.5 por ciento, respectivamente.
El reporte subraya que 0.53 puntos porcentuales del 2.1 por ciento del producto interno bruto (PIB) de 2016 fue por las remesas.
En el desagregado regional, del 3.6 por ciento que se registró en el PIB de la zona centro, 0.5 puntos le pertenecieron a las remesas; de igual forma, 1.1 puntos del 3.4 registrado en la centro norte, 0.4 del 1.9 en el sur, y 0.2 puntos del 2.3 por ciento en la zona norte.
El reporte también mostró que los mayores captadores de remesas por estado fueron Michoacán, con 10.2 por ciento; Jalisco, 9.3; Guanajuato, 9, y Estado de México y Puebla, 5.4 por ciento. “Otras causas que impulsaron los envíos de dinero fueron la apreciación del tipo de cambio real, pues provocó que los migrantes tuvieran las posibilidades y el incentivo para mandar mayores remesas a México”, explicó Chiquiar.
Agregó que también pudo haber influido que ante la retórica proteccionista de Donald Trump, en esos momentos candidato a presidente de Estado Unidos, los trabajadores mexicanos en ese país hayan tratado de adelantar en la medida de lo posible los envíos.
Chiquiar subrayó que mayores remesas se traducen en incremento en el consumo de servicios y productos de quienes las reciven, pero también en un aumento de la producción de bienes por la creciente demanda de los mismos.