Reiniciar, cuando menos, es más
Director general y locutor del Morning show en Alfa
Menos asuntos pendientes, menos frases inconclusas, menos sentimientos sin expresar, menos quejas, menos para después, menos pesadumbre, menos incomprensión, menos inercia, menos abatimiento, menos egoísmo, menos apegos, menos ni para atrás ni para adelante, menos críticas destructivas, menos desaliento, menos sólo para mi santo, menos agresión, menos heridas abiertas, menos miedo y más amor. Menos el proyecto que nunca hice, menos el perdón que no supe dar o pedir, menos soy feo, soy gordo, soy menos; menos así soy y nunca cambiaré, menos y por qué yo, y por qué a mí; menos tengo que tener razón, menos necesito que me reconozcan, menos me siento solo, menos me siento abandonado, menos mi vida no tiene sentido, menos nunca lo podré lograr, menos mi existencia es insignificante, menos me hace falta. Menos pensar que algún día, en el futuro, vivirás como quieres sentirte. Porque esto no es más que una ilusión, y la oportunidad siempre es en el instante presente. Salimos del 2020, que suma cuatro, cuatro puntos, cuadrado, que es una representación de un cubo, que guarda, que encierra, que incuba, ¿te suena familiar? ¿Aprovechaste el cubículo del 2020 para algo bueno? El 5 que suma este año 2021 se traza y traduce en la geometría como cinco puntos, o cinco puntas, un pentágono, y una de las ventanas de un dodeca-hédro, que es la forma más dinámica de la materia, de hecho, el Universo tiene más esencia de un dodecaedro que de una forma amorfa, porque la forma del ADN también da giros en espiral, y como es arriba es abajo, en la auto-semejanza de todo lo que existe. El movimiento que indica la forma pentagonal ¡es de velocidades increíbles! Así que todo lo que resuene en el interior, del color que sea, tendrá salida como un pincel que pinta un lienzo sin parar. Por eso: menos de lo que menos quiero y más de lo que más quiero, ¡convirtiéndome justamente en eso que quiero! Menos frustración y más manifestación consciente, porque lo quieras o no, tus sueños o pesadillas se convertirán en realidad con la velocidad del pentágono, o la estrella de cinco puntas abriendo brecha con todo a su paso. Así que menos peso y más sangre ligera. Avívate, anímate, revivifícate, aliéntate, empújate, aquiétate en paz, échate porras, dibuja tu pizarrón de sueños, proyecta, pero también acciona, muévete al ritmo de la caminadora del 5 para no caerte, y aprovechar la banda giratoria que nos hará los pasos más agigantados. ¿Hacia dónde quieres ir, ya lo sabes? Anímate a soltar y a saltar. Soltar eso que te ata en el camino de las experiencias que tu alma quiere vivir.