Talentoso, pero problemático
Con la llegada de Josh Gordon a los Patriots, el equipo encontró a un receptor con mucha calidad, pero que ha visto mermada su carrera por problemas fuera del emparrillado.
En 2013 fue suspendido por violar la política de sustancias prohibidas.
Un año después, la NFL tenía pensado suspenderlo durante todo el año por fallar de nueva cuenta en un control antidopaje, pero su sanción se redujo únicamente a 10 juegos.
De nueva cuenta, para 2015, el jugador volvió a infringir la política de sustancias prohibidas y se perdió toda la campaña 2015, por lo que ahora deseará dejar huella por su talento en los Pats.