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El abogado de la Iglesia Católica, Carlos Humberto Montalbetti Sapper manifestó que la estudiante está acusada por coacción que es el tipo penal básico “obligarles a las personas a tolerar algo al cuál no está obligado” es la conducta escrita de coacción grave. “Es por la conducta que ella realizó en realidad con otras seis personas que fueron imputadas, pero las otras cinco personas hicieron el reconocimiento de hechos y se beneficiaron con la suspensión penal del procedimiento”, explica Montalbetti.

También señaló que el conflicto se inició por la jubilación del entonces decano de la Facultad Filosofía José Antonio Galeano, cerrando la universidad por 45 días.

“Hay unas cuestiones ideológicas, todas las personas que estaban involucradas en este caso eran anticlerical, y la universidad es una universidad confesional y no está prohibido por la Constitución Nacional. La universidad siempre estuvo del lado de las protestas fueron los que defendieron los derechos humanos en este país en de época de la dictadura, siempre dieron la cara por todas las personas que no podían hablar y en este caso evidentemente hay una cuestión ideológica”, señala.