Gylro: apuesta griega con paladar boricua
Joven arquitecto amplía la oferta gastronómica del oeste con dos establecimientos
Cuando Jimmie Vélez Rosario vivía en España, veía gyros por todos lados. No es sorpresa que, al regresar a Puerto Rico tras estudiar arquitectura, abriera un negocio especializado en ese plato griego basado en carne asada cocinada de modo vertical y servida en pan pita.
Fue así como en enero de 2016 nació Gylro en Aguadilla. Se trata de un restaurante “basado en comida griega, pero con sazón boricua”, que apuesta al oeste como cuna para el emprendimiento gastronómico.
“Somos un restaurante que parte de la comida griega con el concepto de los gyros, pero con un estilo bien criollo. El menú fue pensado en el paladar boricua”, explica Vélez Rosario.
Lo vertical en la preparación de los gyros enamoró al empresario de 29 años. Reconoce que la experiencia de un plato no está solo en su sabor, sino también en los efectos visuales que estos provocan.
“Antes de viajar a España, nunca había visto los gyros y los trompos de carne dando vueltas. Me pareció interesante cómo atraían a la gente, más que por la comida, por el efecto visual. Fue una mezcla de mi viaje de estudiar arquitectura y la cocina. Con Gylro, incorporo ambas cosas”, dice.
IMPACTO INESPERADO EN EL OESTE DEL PAÍS
Han pasado dos años y medio desde la apertura. Tanto ha sido el impacto del concepto que, en abril de este año, Vélez Rosario abrió un segundo local de Gylro en Rincón, que al igual que su primer establecimiento, forma parte del programa Miércoles de Visa, en el que al pagar con esta tarjeta, los clientes reciben un 20% de descuento.
La diferencia, acepta, es la participación de su familia en el negocio que actualmente suma 25 empleados entre ambos locales. Por ejemplo, su hermano incorporó la coctelería en Gylro, su tío es el socio del establecimiento de Rincón y su mamá lleva la contabilidad.
“La gente lo piensa mucho para abrir un negocio. Con el huracán María en 2017, el negocio de Aguadilla estuvo tres meses cerrado. Pero Puerto Rico tiene muchas oportunidades. La clave está en la unión”, aconseja.
Gracias a esas herramientas, Gylro va en vías de recuperar su inversión inicial. Mientras, su propietario confía en seguir aportando al oeste, su hogar, donde entre faena y faena, encuentra espacio para un buen chapuzón playero.