CARDIOPATÍAS
Después de un infarto o del diagnóstico de enfermedad del corazón surgen un montón de dudas sobre lo que se puede o no se puede hacer y los pacientes temen que cualquier esfuerzo extra ponga en peligro sus vidas. El cardiólogo José Mª Maroto, jefe de la Unidades de Rehabilitación Cardiaca de IRF La Salle y de Vithas Nuestra Señora de Fátima de Vigo y miembro de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) nos lo explica: “El miedo a morir durante el coito es frecuente y hace que las parejas tarden meses en retomar su actividad normal. Sin embargo, la actividad física que requiere el sexo es equiparable a la necesaria para subir dos pisos de escaleras. Se considera que si el paciente es capaz de realizar este esfuerzo sin tener síntomas, tampoco se presentarán entre las sábanas”.
Qué podemos hacer. Después de sufrir un infarto, un by-pass, una angioplastia... el médico someterá al paciente a un test de esfuerzo. “Existen programas de rehabilitación cardíaca en los que se pauta el ejercicio, se aborda el control de los riesgos y se actúa a nivel psicológico porque la mayoría están muy asustados. El objetivo es que el paciente recupere su calidad de vida y eso incluye la actividad sexual”, explica el dr. Maroto.