Raúl García, arma letal en El Sardinero
Batió a un Racing que nunca se rindió con dos goles de ariete, el segundo de un cabezazo
Raúl García es la otra arma letal que tiene el Athletic. Cuando falla Aduriz, que no anduvo fino anoche en Santander y acabó cojeando, aparece el bestial futbolista, cada vez más líder en Bilbao. Es un depredador del área. Le bastaron dos ocasiones de oportunista para noquear a un bravo Racing que puede observar con orgullo cómo crece su proyecto desde la cantera. El 1-2 concede mucha ventaja a los de San Mamés, que tienen hoy más pegada que fútbol.
Valverde no se anduvo con bromas en el once. La simple presencia de Raúl García y Aduriz hizo temblar a la defensa local. Bien pronto se notó: para el minuto 10 el ex del Atlético ya había cazado pieza tras un balón parado. El ariete mandó al poste poco después una ocasión de las que no falla.
Daba la sensación de que el asunto iba a ser coser y cantar para los leones pese a la presión de El Sardinero, pero los locales igualaron tras una buena acción iniciada por el imaginativo Coulibaly. Laporte despejó mal el centro y Javi Cobo, gran promesa cántabra de 19 años y grandes bemoles, definió con mucha clase.
Susaeta, infrautilizado este año, dio un golpe en la mesa. Avisó con un tiro lejano que incomodó a Raúl Domínguez para poner poco después el 1-2 en la cabeza del expreso Raúl García. Córcoles aún no le ha visto llegar. El Racing no se rindió y ahondó en los titubeos de Laporte. Se hizo un lío de cabeza con Iraizoz que casi aprovecha el ex león Peña.
Gran intensidad.
El choque siguió intenso, pero con menos llegadas. Sobre todo, porque Txingurri mandó a la ducha a Susaeta pensando en el Eibar. Santamaría sacó a Aduriz el 1-3 de la raya tras amistoso centro de Raúl García, mientras Aquino tuvo en su bota derecha, la mala, el empate. Al Athletic le pareció suficiente renta y se aprestó a gestionar la posesión de balón sin arañar más al once de Viadero, que fue acusando el cansancio. Muy digno rival.