Miranda tiene fe en el milagro
El Sevilla sólo malgastó un 2-0 en cuatro de 18 ocasiones; Anduva será una fiesta
Sergio Rico brilló el domingo en el Calderón y el lunes firmó la ampliación de su contrato (hasta 2019, 30 millones de cláusula de rescisión) pero si no hay modificaciones el plan de Emery es que sea David Soria, suplente del internacional, quien defienda en Anduva el 2-0 de la ida. Entonces fue el portero del Mirandés, Raúl, quien mantuvo con vida una eliminatoria en la que, si se cumple el pronóstico, el Sevilla alcanzará las semis tres años después. Aquel año le eliminó el Atlético. De 18 veces que partió con 2-0 en ventaja en su historia en eliminatorias coperas, sólo cayó en cuatro.
Carlos Terrazas, no obstante, ha prometido guerra y la moral de los jabatos está intacta. El domingo ganaron en La Romareda a otro histórico, el Zaragoza, así que el vestuario rojillo se siente preparado para todo. Miranda, banderas rojas en los balcones y colas para conseguir una entrada, prepara una noche con aroma copero. Se repiten las arengas: “¡Tiñamos Miranda de rojo y negro! El equipo necesita un estadio lleno, una ciudad entregada y una afición volcada”.
Sevilla y Mirandés no hablan sólo de la Copa del Rey. También de mercado. Monchi mira el reloj para compensar la baja de Immobile y, tal vez, reforzar la defensa. Keko y Fazio, los nombres que más sonaron, no se concretan. Vuelve a irrumpir André Carrillo, extremo peruano del Sporting de Portugal. El Mirandés mientras ya ha anunciado el fichaje de Oyarzun procedente de la Real y ha perdido a Lago Júnior. Emery se guarda a Banega, Krohn-Dehli y Tremoulinas y se blinda con Cristóforo, Krychowiak e Iborra. Terrazas prometió un infierno y el Sevilla no puede esperarse otra cosa.