Las cifras marean en el fútbol
El mundo del fútbol se ha vuelto loco. La astronómica cantidad que el PSG ha pagado por Neymar ha abierto la veda para que cualquier jugador que destaque un poco sea tasado por su equipo con cifras mareantes, indignas en comparación a la situación que el mundo vive actualmente. Se piden por jugadores como Coutinho, Dembélé o el mismo Mbapé, cantidades que hace muy poco parecían imposibles para las arcas de cualquier equipo, por muy poderoso que fuera o se llamase. Pero los petrodólares (o del gas) empleados por el equipo parisino para conseguir los servicios del brasileño han hecho que los culés tengan dinero, pero también la necesidad, de minimizar el impacto causado por la salida de Neymar intentando fichar a jugadores por los que sus clubes, conscientes de las necesidades y el poder económico del Barça en estos momentos, tratan de sacar más de la cuenta. Piden unas cantidades que hace sólo un año nos hubiesen sonado a risa. Así que estoy de acuerdo con Klopp cuando dice que a este paso los 300 millones de la cláusula de Messi van a resultar calderilla. No sé si esto tiene alguna posibilidad de pararse, pero de momento no parece que haya una solución.
Mariano Antolín Castrillo de Don Juan