Trabajo en la sombra
La labor de Víctor Sastre con la juventud es de incalculable valor por el poso que ha dejado en miles de chavales, pero el respaldo de las instituciones no ha estado en consonancia. "Han desaparecido las Cajas de Ahorros, que hacían una labor muy importante con el deporte base. Si ahora las instituciones apenas ayudan, ¿quién mantiene el deporte de base? Hay que fomentar y aumentar la desgravación. En Estados Unidos las empresas se desgravan el cien por cien de lo que invierten en obra social. En una Fundación, si hacen una donación de hasta 250 euros se desgravan el 75% y de 250 a 500 euros un 50%. Pero la desgravación de una empresa en la que figure su publicidad es la misma que para un club normal". La Fundación Víctor Sastre realizó durante tres años el programa Soy Bici, en el que participaron 6.000 niños de cuarto a sexto de la ESO con una gran aceptación por parte del profesorado y los alumnos. "Se tuvo que dejar de hacer por los costes que suponía, ya que no recibíamos ninguna ayuda por parte del Ayuntamiento ni de la Junta. La Diputación de Ávila colaboraba, pero desde hace cinco años su apoyo es escaso. Considero que no se han planteado lo que supone para Ávila y la provincia el mantenimiento de una organización que lleva 35 años realizando un trabajo social que tiene más importancia de lo que las instituciones piensan y valoran. El deporte base se mantiene por los cuatro locos que sí apreciamos el trabajo hacia nuestros niños y jóvenes. Hemos salido adelante gracias al empeño de muchas personas voluntarias que siempre han estado y están a mi lado. Ahora contamos con el respaldo de la Diputación de Ávila, el Ayuntamiento de El Barraco, Giant, Manso Motor y Etxeondo, entre otros".