“Prohibido acompañantes”
Puede que esta expresión resulte un poco exagerada, pero es más bien realista. Y es que en el restaurante Eenmaal, que abrió en 2013 en Ámsterdam, todas las mesas eran para un único comensal (de hecho, la expresión neerlandesa eenmaal se traduce como “comida para uno”). Lamentablemente, fue una experiencia limitada en el tiempo, un pop-up restaurant que, al menos, encendió el debate sobre comer sin compañía. ¿Se atreverá alguien a hacer algo así en España de forma permanente?