visto y no visto
SALTÓ A LA FAMA CUANDO fue contratado por Kanye West como director creativo de su firma Yeezy y ahora su nombre brilla con luz propia en el firmamento de la moda masculina. Virgil Abloh no dudó en aprovechar el tirón mediático del rapero para poner en marcha hace dos años una propuesta destinada a transformar el casualwear del siglo XXI: Off-white. Gracias a ella, las sudaderas con capucha oversize se han convertido en una de las prendas clave para entender el estilo de la década que vivimos, capaz de transgredir la tradicional división entre ropa para el día y para la noche. Según Abloh, el streetwear es lo que domina el menswear actual y la sastrería importa, desde luego, pero juega un papel secundario hoy en día. Debo reconocer que razón no le falta, sobre todo al observar a las nuevas generaciones y comprobar que usan sus prendas y accesorios de estilo sporty para reafirmar su propia personalidad. Esta primavera 2017 el diseñador norteamericano ha decidido mover ficha respecto a la era Trump y defender la igualdad ante la intolerancia. Y para ello se ha buscado un partner poderoso llamado Nike. Entre ambos han creado la camiseta Equality, con un mosaico de banderas estampado en el pecho y sus logos alrededor del cuello. Como símbolo del streetwear más combativo, la edición limitada de esta pieza se agotó en tan solo unos días a través de la red. Por ello, a Nike y a Abloh no les ha quedado más remedio que producir muchas más para seguir vendiéndolas por el módico precio de 40 dólares. ¿Moda casual para luchar por los derechos humanos? Bienvenida sea. Solo un detalle más. No me extraña que el trabajo de Abloh para su firma sea el que abandera esta necesaria reivindicación y no el que realiza para Kanye West, un artista demasiado preocupado por otras cuestiones.