El cuidado natural delcabello ...........

Presentamos la primera parte de un acercamiento a los cuidados naturales y cosmética en general, comenzando por el cabello. Si elegimos los beneficiosos ingredientes botánicos y dejamos de lado los productos químicos sintéticos, los sulfatos tan dañinos y las sofocantes siliconas, el pelo y el cuero cabelludo vivirán más felices y sanos. En esta primera parte repasaremos ingredientes y consejos junto a las primeras recetas. Cabello brillante y natural

Si tratas tu cabello con cuidado y atenciones, estará sano y tendrá buen aspecto. Lo mejor que puedes hacer por él es cuidarlo de forma natural y evitar los productos convencionales que contienen sustancias químicas agresivas, productos derivados del petróleo, sulfatos, tintes sintéticos y otros ingredientes potencialmente dañinos. Así que, elige cuidar de tu cabello con ingredientes a base de plantas que lo fortalecerán, suavizarán e hidratarán.

Tratamientos capilares naturales. Combatir el cloro

El agua con cloro puede causar estragos en tu cabello. Considera la posibilidad de instalar un filtro en el cabezal de la ducha para eliminar las sustancias químicas agresivas antes de que lleguen a tu cabello y a tu piel.

Aplica una generosa cantidad de aceite o de sérum capilar en tu pelo y cuero cabelludo antes de ir a nadar para protegerlos de las agresivos productos químicos de la piscina y del cloro. Aplícalo tantas veces como sea necesario.

Elegir entre productos capilares naturales y convencionales

Productos naturales: Los productos naturales para el cuidado y el peinado del cabello a menudo se formulan con los ingredientes botánicos que incluimos a continuación. Dichos ingredientes hidratan el cabello, suavizan las cutículas, aumentan el brillo y suavidad naturales del pelo, evitan las roturas, incrementan su docilidad y fortaleza y lo protegen de los radicales libres. Además, ayudan a que el cabello tenga un aspecto más voluminoso, espeso y saludable.

• Aceites naturales de plantas • Extractos naturales de plantas

• Aceites esenciales naturales

• Hierbas naturales • Jabón de Castilla • Bicarbonato de soda • Arcillas naturales • Vinagre de sidra • Glicerina vegetal • Frutas y verduras

Productos comerciales convencionales: Algunos de estos productos pueden estar formulados con los siguientes ingredientes de dudosas propiedades, que pueden provocar alergias, sensibilidad, dañar el cabello y resecar la piel. Además, en el peor de los casos, pueden ser potencialmente cancerígenos o tóxicos de algún otro modo.

Algunos de ellos también suponen una amenaza para el medio ambiente. La que ofrecemos a continuación es una lista parcial de ingredientes cuestionables:

• Parabenos • Sulfatos • Siliconas • Tintes sintéticos • Fragancias sintéticas • Ftalatos

• OMG (organismos modificados genéticamente) • Triclosán • Propilenglicol • Polietinelglicol • Aceite mineral.

Elegir los mejores ingredientes para tu tipo de cabello

Todos los tipos de cabello pueden estar perfectamente nutridos si se les aplican los ingredientes adecuados. En este cuadro podrás determinar cuáles son los ingredientes más idóneos para tu tipo de cabello.

Normal. Aceites: albaricoque, argán, baobab, semilla de borraja, semilla de uva, jojoba, nuez de kukui, almendra dulce.

Aceites esenciales: cedro, amaro, geranio, lavanda, romero, sándalo.

Graso. Aceites: albaricoque, argán, avellana, jojoba, nim, sésamo, karité, girasol.

Aceites esenciales: ciprés, geranio, pomelo, lavanda, limón, naranja, menta piperita, romero, árbol del té.

Seco. Aceites; almendra, argán, aguacate, baobab, ricino, coco, onagra, nuez de macadamia, semilla de limnanthes

alba, nim, oliva, semilla de escaramujo, soja, aceite de germen de trigo. Aceites esenciales: semilla de zanahoria, amaro, Eucalyptus citriodora, lavanda, palmarosa, pachuli, romero, sándalo.

Tratado y dañado. Aceites: argán, aguacate, baobab, borraja, camelina, ricino, onagra, semilla de cáñamo, nuez de macadamia, oliva, granada, escaramujo, sésamo, soja, vitamina E. Aceites esenciales: caléndula, semilla de zanahoria, amaro, ciprés, manzanilla alemana, flor de papel, lavanda, mirra.

Áspero. Aceites: argán, aguacate, ricino, coco, semilla de cáñamo, nuez de macadamia, oliva, semilla de granada, escaramujo, manteca de karité, vitamina E.

Aceites esenciales: semilla de zanahoria, manzanilla alemana, flor de papel, sándalo, árbol del té.

Evitar el exceso de cepillado

Cepillarte el pelo cien veces al día es, de hecho, una muy mala idea. Al cepillarlo, estiramos el cabello, lo que puede provocar daños y puntas abiertas. En lugar de eso, usa los dedos para masajear tu cuero cabelludo durante unos minutos para estimular la circulación sanguínea y relajar tu mente.

Limpiadores capilares

Los limpiadores capilares son muy importantes para mantener un cabello limpio y brillante. Eliminan la suciedad, la grasa y los residuos que dejan algunos productos. Si lavamos suave- mente el cabello y el cuero cabelludo, un pelo lacio y sin vida se convierte en una melena resplandeciente y lustrosa lista para peinar. No hay que lavarse el pelo todos los días. A menos que tu cabello sea fino como el de un bebé y/o tu cuero cabelludo muy graso, con lavarlo unas pocas veces a la semana es suficiente. Hacerlo con demasiada frecuencia produce puntas abiertas, cuero cabelludo seco y un pelo indomable.

Jabón de Castilla, un champú líquido básico

Cuando decidas «no usar champú» y elijas limpiar tu cabello con bicarbonato sódico y acondicionarlo con un enjuegue a base de vinagre, notarás que el pelo se vuelve o muy graso o muy seco. Continúa con el programa hasta que tu cabello se ajuste a él y encuentre el equilibrio. Puede transcurrir hasta un mes antes de que empieces a disfrutar de los resultados naturales.

Los limpiadores capilares a base de jabón de Castilla pueden en ocasiones dejar el cabello encrespado y difícil de peinar. Intenta aplicar el limpiador sobre el pelo con las manos planas, realizando un movimiento de presión en lugar de masajear con los dedos. De este modo el cabello permanecerá en su sitio en lugar de enredarse mientras está mojado.

El jabón de Castilla líquido tiene un largo historial. Se fabrica saponificando aceite con hidróxido de potasio, que es un ingrediente alcalino. Este jabón líquido diluido es fantástico para limpiar el cabello de forma natural.

Muchos de los jabones de Castilla líquidos que se comercializan también contienen aceites esenciales naturales como el de naranja, limón, lima, menta piperita e incluso eucalipto. Estos aceites esenciales confieren al champú un aroma fresco y, en ocasiones, ofrecen una experiencia revitalizante, como sucede con el champú de jabón de Castilla y menta piperita.