Oso en la red

La afición de los seres humanos a filmar sus hazañas de todo tipo y colgarlas luego en las redes está alcanzando cotas dignas de estudio. Tanto es así que algunos se creen obligados a idear, protagonizar y colgar episodios que les parecen singulares, pero sólo son extravagantes. Eso es lo que hizo Josh Bowmar al cazar cerca de Edmonton (Canadá) un oso a la lanza, mientras registraba la captura con una cámara subjetiva y también con la de unos amigos citados a tal efecto. Esta partida de caza mayor ha recibido ya 200.000 visitantes en YouTube. Y ha merecido críticas, de las que Bowmar se defendió diciendo que no hacía sino practicar una ancestral variedad cinegética. Aunque luego se traicionó al añadir: “Acabo de hacer algo que no creo que nadie haya hecho jamás: lancear un oso y filmarlo”. ¿Qué culpa tenía el oso del ansia de notoriedad mediática de Bowmar? Creemos que ninguna. Y creemos que las autoridades han hecho bien al anunciar la prohibición de este tipo de actividad.