Sibelius por Mullova
La violinista rusa abre el BCN Clàssics con la Bamberger Symphoniker
Viktoria Mullova, la Bamberger Symphoniker y el Concierto para violín de Sibelius. Con esas tres entidades artísticas de primer nivel europeo abre hoy el BCN Clàssics en el Palau de la Música, un ciclo que desde su nacimiento ha defendido, por un lado, el programar a los más relevantes intérpretes europeos y, por otro, recuperar el patrimonio musical del país, labor para la que se ayuda de la Orquestra de Cadaqués.
Mullova (Jukovski, Federación Rusa, 1959), que precisamente ganó en sus inicios, hace cuatro décadas, el concurso Sibelius de Helsinki, se lucirá en esta ocasión con el único concierto para instrumento solo que compuso el autor finés, en 1903. Y lo hará de la mano del director checo Jakub Hrusa, el nuevo titular de la Bamberger Symphoniker, que ya es el quinto en la historia de esta prestigiosa formación alemana fundada en 1946 en sustitución de la entonces desaparecida Filarmónica Alemana de Praga.
Mucha densidad histórica concentrada hoy en el Palau. A parte de la versatilidad de Mullova, a la que el año pasado se vio en Torroella tocando desde Mozart a Arvo Pärt, la velada brinda una de las obras que atrapan al gran público, la Sinfonía del nuevo mundo de Dvorák. Y para completar la apuesta por la música de cambio de siglo XIX y XX, una obertura con Mi patria, de Smetana.
Por cierto, el día 1 de diciembre será el turno de un concierto extraordinario de BCN Clàssics con otra recuperación del teatro lírico modernista: Picarol, de Granados con libreto de Apel·les Mestres, una obra que no volvía a llevarse a escena desde su estreno, hace más de cien años.