Niños y niñas, por igual
Tradicionalmente han sido las niñas las que han ayudado en casa (a las madres), mientras que ellos eran los pequeños reyes, quienes (como sus padres) no podían tocar ni un plato. Incluso en sociedades como la de los matsigenka, hay distinciones de sexo en las tareas: hasta los seis años, niños y niñas hacen lo mismo pero, a partir de esa edad, ellos acompañan a sus padres a cazar y cultivar, y ellas se quedan junto a sus madres para ayudar a cocinar, barrer y cuidar de los niños... “En nuestra sociedad, las madres siguen asumiendo el gran volumen de las tareas familiares y esto los niños lo ven”, dice la psicóloga Maribel Martínez. La pedagoga María Vinuesa lamenta que todavía se transmita este modelo: “Hay muchísimo por hacer, pero esta discriminación también se puede empezar a trabajar desde casa”, propone.