“Ciudadano de la Atlántida”
JAUME FERRAN (1928-2016) Poeta y ensayista, premio Gaziel de Biografías y Memorias
Vivir es la costumbre de ir muriendo, de no saber morir es la costumbre”. Son versos de estilo quevedesco escritos por Jaume Ferran Camps, poeta, escritor y profesor universitario, que falleció el pasado 6 de febrero en la ciudad de Smyrna, en el estado de Georgia (Estados Unidos), según informó el Ayuntamiento de Cervera, ciudad de la que Ferran era hijo predilecto. El escritor cultivó la poesía, el ensayo y el género memorialístico –sus únicos libros escritos en catalán–, de tal forma que sus Memòries de Ponent fueron galardonadas en el año 2000 con el premio Gaziel de Biografías i Memorias, que convocan la Fundación Conde de Barcelona y Edicions 62.
Jaume Ferran, hijo de una familia de agricultores acomodada, nació en 1928 en Cervera, donde hizo sus primeros estudios y vivió en toda su crudeza los horrores de la guerra. Estudió Derecho en la Universitat de Barcelona, donde pudo desarrollar su vocación por la literatura. Ferran, como su amigo Alfonso Costafreda, se integra en el grupo de escritores noveles que más tarde serán conocidos como generación de los 50, formado entre otros por los poetas Carlos Barral, Jaime Gil de Biedma, José Agustín Goytisolo, Llorenç Gomis, Jorge Folch y Enrique Badosa. Licenciado en Derecho, Ferran marcha a Madrid, donde será un estrecho colaborador de Eugenio d’Ors en su cátedra de Ciencia de la Cultura, del que se considera discípulo y al que dedicó un ensayo. El año 2000, en una entrevista en La Vanguardia, firmada por Xavi Ayén, con motivo de la concesión del premio Gaziel, declaró que se consideraba, “como mi maestro D’Ors, ciudadano de la Atlántida, un imperio místico cuya capital está sumergida en el mar”. Afincado en Estados Unidos desde el año 1960, enseñará literatura española en la Universidad de Syracuse, en el estado de Nueva York, aunque vuelve constantemente a Cervera entre viaje y viaje por todo el mundo. Durante su es- tancia americana tendrá la ocasión de conocer personalmente al poeta Ezra Pound, ingresado en un manicomio, al que luego traducirá, uno de sus autores de cabecera junto a D’Ors, Joan Maragall, Yeats o Josep Carner.
El primer libro de poemas de Ferran se publica el año 1952 y lleva por título Desde esta orilla, al que seguirán Poemas del viajero (1953), Descubrimiento de América (1957), Canciones para Dulcinea (1959), Libro de Ondina (1964), Nuevas Cantigas (1967), Memorial (1971), Libro de Alfonso (1983), Las alas del Fénice (1988), Historia Natural (1989) y Corónica (1992). El Libro de Alfonso es un homenaje a su amigo Costafreda, con el que compartió sus primeras inquietudes literarias entre Cervera y Tàrrega. El crítico literario Xavier García, conocedor de la obra de Ferran, destaca la trayectoria literaria singular del poeta fallecido respecto de los poetas barceloneses, “pues es el único que da dimensión épica a su poesía, se inspira en los viajes y tiene una dedicación especial a la literatura para niños”. Así, Historia Natural es la historia de Catalunya en verso, mientras que Corónica trata de la colonización española en América. Sus libros infantiles más destacados son Tarde de circo, donde rememora una sesión de espectáculo circense de su infancia, y la serie dedicada a Ángel, un personaje que explica a los niños diferentes países, como Ángel en Colombia.
La familia ha anunciado un funeral en Cervera para los próximos días, mientras que la Paeria ha anunciado que organizará un homenaje para uno de sus hijos más preclaros. Ferran amaba profundamente su ciudad natal y una buena muestra es que nunca dejó de colaborar con la revista Segarra.