Los Mossos piden imputar al Barça por delito fiscal
El club abonó sin IVA las facturas que pagó a las empresas fantasma del Barçagate
El FC Barcelona, como institución, puede acabar pagando los platos rotos por la gestión de Josep María Bartomeu en el caso Barçagate. Los Mossos d’esquadra detectaron que el club blaugrana pudo cometer un delito fiscal al contratar empresas ficticias radicadas en Sudamérica para un trabajo que en realidad se elaboraba en Barcelona, con lo que las facturas se debían haber pagado con IVA. Así consta en la causa judicial a la que ha tenido acceso La Vanguardia.
Los investigadores han remitido la información a la Agencia Tributaria para que corrobore sus sospechas. Hacienda deberá elaborar un informe y enviarlo a la juez de instrucción que deberá decidir si imputa al club como persona jurídica, la misma fórmula por la que ya fue imputado y luego condenado en el caso Neymar. Desde julio, el Barça está personado en la causa del Barçagate como perjudicado. El encargado de representar al club y velar por sus intereses es el abogado Carles Monguilod. El pasado lunes, tras la operación policial que culminó con la detención de Bartomeu y su cúpula, la juez decidió levantar el secreto de las actuaciones y aceptó al club como parte perjudicada. Si finalmente acaba imputado por delito fiscal, se podría dar el caso de que el club tuviera una doble condición en una misma causa: perjudicado por la actuación de Bartomeu en la contratación de I3ventures e investigado por delito fiscal por no pagar el IVA de aquellas facturas. Este será uno de los primeros asuntos jurídicos con los que deberá lidiar la nueva junta directiva que escojan los socios este domingo.
Las sospechas de los Mossos están fundamentadas en varios indicios. Primero, en la declaración que prestó un exempleado de I3 Ventures que aseguró que a pesar de que el Barça pagó las facturas a ocho compañías distintas, algunas establecidas en Uruguay, Argentina o Chile, todo el trabajo se hacía desde una oficina de Barcelona. Esto llevó a los agentes a pensar que todos aquellos trabajos realizados en España deberían haberse pagado con IVA, algo que no se hizo. “Las facturas abonadas a las empresas americanas no llevaban el IVA añadido”, aclaran los Mossos. El servicio, al haber sido fraccionado para poder eludir el control de la comisión de adjudicaciones del club, se abonaba entre diferentes empresas, algunas sin trabajadores o incluso sin sede, como demostró ayer La Vanguardia, con la fotografía de una caravana aparcada en un descampado que albergaba ficticiamente la sede de la compañía UT Uruguay. El objetivo según los Mossos era “dificultar la identidad del destinatario final”. Una vez el dinero llegaba a estas empresas fantasma se transfería automáticamente a las cuentas de I3ventures en Barcelona, que era la caja única adonde iban a parar todos los pagos que utilizaba “el grupo empresarial ficticio”. Aun así, los Mossos señalan que el encargado de haber pagado el IVA era el club. “Como el sujeto pasivo es el FC Barcelona, sería el propio club el responsable del pago a Hacienda”, subraya. En la temporada 2017-18, el IVA que se debería haber pagado por los trabajos que hacían las empresas fantasma habría alcanzado los 192.780 euros. En la temporada 2018-2019, 157.437. Y en la 2019-2020, el mismo importe: 157.437. Todas las cuantías superan los 120.000 euros que determinan el umbral que delimita el delito fiscal.
HARÁ UN INFORME
Los investigadores remiten sus sospechas a Hacienda y será la juez quién decidirá si investiga al club
SEGÚN EL SUMARIO JUDICIAL
El fraccionamiento de las facturas se hizo para “dificultar la identidad del destinatario final”