NUEVO ICONO «PREMIUM»
LAS MARCAS «PREMIUM» YA TIENEN UN NUEVO COMPETIDOR. EL DS 7 CROSSBACK ENTRA DE LLENO EN EL SEGMENTO CON UN SUV CON DISEÑO ROTUNDO Y DISTINTIVO Y UN INTERIOR CON ACABADOS MUY BUENOS. HEMOS PROBADO LA VERSIÓN DIÉSEL DE 177 CABALLOS, CON UNA CAJA AUTOMÁTICA
El aspecto exterior del DS7 Crossback, sin ser de los SUV más grandes (mide menos de 4,6 metros), impresiona. Es musculoso y a la vez elegante, con una línea lateral muy dinámica y una parrilla frontal amplia y agresiva. El interior es impactante. Por un lado se aprecia una pureza de líneas en el salpicadero y la consola central, pero, a la vez, la forma de los botones, las salidas de aire laterales y algunas molduras decorativas revelan un espíritu suntuoso y vanguardista. El tapizado en alcántara de la versión probada (Performance Line) es muy cálido y agradable, con costuras en rojo y amarillo, y el ajuste de todas las piezas es simplemente perfecto.
En el cuadro de mandos, totalmente digital, podemos elegir varias configuraciones. Los asientos son muy cómodos y hay diversos huecos y guanteras para dejar objetos, entre ellos una bandeja de carga inalámbrica para el móvil. El maletero tiene 555 litros, una buena capacidad.
El motor diésel de 177 CV da una buena aceleración, 9,4 segundos, pero sobre todo llama la atención la agilidad con la que se mueve. Es muy agradable de conducir porque se siente ligero, a pesar de que son 1.600 kilos, y a esto contribuye la caja de cambios de ocho relaciones. A diferencia de la mayoría de coches automáticos, apenas hay resbalamiento entre marchas, así que pasar de una a otra es prácticamente imperceptible. La insonorización es alta y la suspensión mantiene el tipo en las curvas, con un apoyo sobresaliente y sin balanceos. En modo Sport se transforma, la dirección se endurece, el motor sube de revoluciones con más facilidad y el sonido se hace más ronco.
GRAN DISEÑO
Los pasos de rueda ensanchados, los faros traseros —muy estilizados y con efecto joya— y las falsas salidas de escape refuerzan su marcada personalidad.