Víctima de la frustración
Sebastian Vettel vive un año complicado en Ferrari y ha perdido los nervios en varias ocasiones con facilidad
En el Gran Premio de México, Sebastian Vettel pudo lograr uno de sus primeros récords con Ferrari, el de más insultos en un Gran Premio. Antes de los improperios dedicados a Charlie Whiting con un ‘que te den’ que ha dado la vuelta al mundo, llamó “estúpido” a Massa y Carlos Sainz , “idiota” a Fernando Alonso y escupió fuego por la boca al referirse a Verstappen en carrera. Todo ello, en un mismo fin de semana. Pero lo que más llama la atención es la reincidencia del alemán, que tiene en su ex equipo su principal rival para lograr subir al podio en cada carrera y, a su vez, su objetivo preferido en sus declaraciones. El primer cruce de palabras que tuvo Vettel este año fue con Kvyat en China. “Estás loco”, le dijo Vettel al ruso en Shanghai por un incidente con el ruso en la primera curva, algo que no sentó nada bien al entonces piloto de Red Bull. Pero a partir de entonces, el alemán fue alternando sus mensajes pedantes por radio cuando alguien le molestaba en pista en un Gran Premio, con duros ataques a Verstappen. Su particular lucha verbal empezó en Bélgica. “Tenemos que hablar”, expresó el germano después de que el holandés le tocara en la salida de Spa. “Vettel y Raikkonen tienen que estar avergonzados”, respondió en aquella ocasión el joven neerlandés sin arrugarse ante todo un tetracampeón venido a menos desde que está en Ferrari. Este año ha sido centro de las críticas de la prensa italiana por no lograr una reacción en la escudería del ‘Cavallino Rampante’. La constante comparación con los años de Alonso cuando vestía de rojo tampoco le ayudan en una temporada en la que acumula múltiples errores y disgustos. En Bahrein, el motor de su Ferrari dijo basta en la vuelta de calentamiento, en Alemania aflojó su ritmo en la última vuelta pensando que ya había terminado la carrera, en Bélgica se llevó por delante a Raikkonen y en Malasia tocó a Rosberg en la salida. En aquella ocasión fue el germano el que recibió insultos por radio. “Me sorprende haber sido golpeado por un cuatro veces campeón del mundo totalmente fuera de control”, expresó Rosberg sabedor de la frustración que siente su compatriota en el equipo italiano después de no ser capaz de ganar un Gran Premio desde el pasado 20 de setiembre de 2015, el último de sus tres triunfos con Ferrari
PRESIÓN Es considerado uno de los culpables de la no reacción de Ferrari
COMPARACIÓN El alemán no ha marcado la diferencia y sólo aventaja a Raikkonen en 9 puntos en el Mundial