TER STEGEN DE

El Athletic se estrelló contra Ter Stegen. De no haber sido por dos grandes manos del portero alemán, una en el primer tiempo a remate de Susaeta y otra cerca del final a tiro de Williams, el líder hubiese hincado la rodilla en San Mamés ante un conjunto rojiblanco que, pese a todo, también sufrió lo suyo para dejar intacta la meta de Herrerín. El reparto de puntos, en cualquier caso, puede considerarse justo a tenor de lo visto sobre el rápido césped bilbaíno.

Los de Garitano supieron hacer la lectura adecuada de este complicado choque en todo momento. Cuando tocaba apretar, apretaron. Cuando se necesitaba meter el culo atrás, lo metieron. Hubo algunas fases en las que pareció que los de Valverde se iban a llevar el gato al agua, pero también se pasaron por otras en las que la sensación fue la contraria. Ni con la roja a última hora a De Marcos se llegó a temer lo peor.

Lo que sí conviene poner al alza en esta ocasión es el acierto de Gaizka Garitano en los cambios. Cuando el Athletic empezaba a caerse tras el arranque de la segunda mitad, tardó lo justo y necesario en meter primero a San José y después a Muniain y su equipo experimentó una notable mejoría. De pasar de defender metido atrás, de hecho, empezó a asomarse en ataque y a