Dos puntos y cuatro penaltis menos
El Barça reclamó dos manos, un empujón a Sergi Roberto y la falta final a Semedo Miranda, a la grada El joven lateral zurdo, sin Jordi Alba en Bilbao por sanción, fue el descartado por Valverde y vio el partido desde la grada. La roja a De Marcos Del Cer
El partido acabó con suspense. En el minuto 95, Del Cerro Grande señaló el final del encuentro, pero antes esperó a que desde la sala del VAR revisaran la última acción del choque. Un posible penalti de Yeray a Semedo. Los jugadores de uno y otro equipo presionaban al colegiado, que pedía distancia mientras esperaba un ‘chivatazo’ a través del pinganillo.
Tras escuchar el juicio de Guillermo Cuadra Fernández, el árbitro asistente del VAR, Del Cerro Grande decretó que no había penalti y por tanto el final del partido. La acción es dudosa y admite todo tipo de interpretaciones. “Es más claro que el de ayer de Vinicius”, lamentaba tras el choque algún seguidor azulgrana. Las repeticiones televisivas corroboraron que el defensa del Athletic no toca el balón y barre las piernas del portugués.
La actuación de Del Cerro Grande no dejó a nadie satisfecho. Desde el bando azulgrana se habían reclamado antes dos penas máximas por manos dentro del área del Athletic, una de Williams y otra de De Marcos, mientras que Sergi Roberto pidió
La actuación de Del Cerro Grande no dejó a nadie satisfecho en San Mamés
otro penalti por un empujón de Yuri dentro del área. En total, pidieron cuatro penaltis. Y se ahorró un lío porque un remate de Messi fue al larguero, puesto que ya había pitado fuera de juego y no lo era.
El Athletic también reclamó una mano de Semedo en el área y no entendió el show arbitral en la expulsión de De Marcos, que se fue tras ver la doble amarilla pero sin que el colegiado le mostrara la roja.
Al final, el Barça volvió de Bilbao con dos puntos y cuatro penaltis menos. Nadie en la expedición azulgrana puso el arbitraje como excusa, pero sí existe la sensación que la presión mediática que se ha ejercido sobre el VAR desde Madrid al final tiene incidencia en las decisiones de los colegiados.
Del Cerro no fue el único nexo común entre los aficionados de uno y otro equipo. Los ‘culés’ desplazados agradecieron que por megafonía se hablara en catalán y aplaudieron las pancartas que reclamaban la libertad de los presos políticos