El ángel Ter Stegen

Define Wikipedia la palabra Ángel con estas palabras: “Es un ser sobrenatural, inmaterial o espiritual cuyos deberes son asistir y servir a Dios”. Con los pies en la tierra y un balón en el aire en un campo de fútbol la definición viene como anillo al dedo para decir que Marc-andré Ter Stegen es el ángel del dios del fútbol de hoy en día, al que todos conocen por el nombre terrenal de Leo Messi. Pero si uno se va al terreno sobrenatural encuentra que Prince Boateng, compañero de Ter Stegen, halla una palabra para definir al portero del Barça: “Alien” colocó en Instagram el reciente fichaje del club blaugrana debajo de la foto del inmenso y celestial paradón de Ter Stegen en San Mamés.

Los porteros tienen la inexplicable encomienda de destruir lo que hace al fútbol feliz, como es la consecución de un gol. No hay posición más ingrata que esa. Si fallas, como le pasó al portero del Liverpool, Karius, en la última final de la Champions League ante el Real Madrid, tal error te persigue como una maldición hasta que te mueras. Pero hay paradas o vuelos de porteros, como esa de Ter Stegen que invitan al “oh”, disparan la sensibilidad e hipnotizan tanto que ves en ellas poesía y hasta seducción. Y hasta por la cabeza se cruza el gol de Messi al Getafe de hace casi 12 años como si fuera el equivalente a ese vuelo tan espectacular del portero alemán, hoy identificado con todo lo que huele a Barça. Ter Stegen para igual por abajo que por arriba. Por eso va en metro y también vuela