dieta. ¡La cena perfecta existe!
Es aquella que cuida la calidad de los alimentos y su forma de preparación. sigue las claves y equilibra la última ingesta del día.
De grandes cenas están las sepulturas llenas, decía el dicho y es que está claro que tanto el exceso como el defecto (irse a la cama con el estómago vacío) resulta contraproducente. “El menú nocturno completa el aporte diario de nutrientes, siempre que haya buenas elecciones y que estas se preparen con una cocción saludable, como en el caso de la comida”, explica Luján Soler, nutricionista y decana del Colegio Profesional de DietistasNutricionistas de Madrid (Codinma).
comPensa el desajuste
Nunca hay que saltársela, tiene un papel estelar. ¿Cuál? “Ayuda a cumplir con los requerimientos diarios de nutrientes”, explica la experta. En cuanto a lo que se debe poner encima de la mesa, en qué cantidad y cómo, prima el sentido común. “Las raciones dependen de muchos factores (edad, sexo, actividad física, tipo de trabajo, peso, gustos) y estados fisiológicos como el embarazo o de si se sufre alguna patología. Ante la duda, consulta con un profesional. Entonces, ¿cómo debemos confeccionarla? Cuida lo que comes. “En esta ingesta principal deben primar alimentos de origen vegetal y proteínas junto con un pequeño aporte de hidratos de carbono (de grano entero) y grasas buenas. Además, es vital su forma de cocinado. “De nada sirve elegir ingredientes saludables si luego los fríes”. ¿Y de postre? Puedes tomar fruta. “toma las piezas enteras con su piel y no te limites, hay recetas placenteras como una macedonia a la que agregas yogur natural sin azúcar”.
Y si llegas con hambre...
No se acaba el mundo, hay que buscar soluciones que no pesen. “Mientras preparas la cena, toma una fruta, un puñado de frutos secos al natural o una galleta de maíz. Esto evitará el picoteo sin control de otros productos calóricos”.
hAz lA digeStión AnteS de irte A lA cAmA. Evitarás El rEflujo y bAjAS el rieSgo de Sufrir SobrepeSo.