Como una estrella de rock
Visiblemente emocionado, el presidente del Supremo, John Roberts, recordó la pasión de Ginsburg por la ópera y cómo acabó convirtiéndose en toda una estrella que ha movido multitudes, incluso a título póstumo.
“Se decía que Ruth quería ser una virtuosa de la ópera pero en su lugar se convirtió en una estrella de rock. Encontró su escenario justo a mi derecha, en nuestra sala judicial”, rememoró.
En ese sentido, Roberts explicó cómo la jueza ha llegado a ser tal ídolo de jóvenes y mayores: “Logró triunfos famosos que contribuyeron a acercar nuestra nación a una justicia igualitaria bajo la ley, hasta el punto de que las mujeres son ahora la mayoría en las escuelas de derecho, no simplemente un puñado”.