Infraestrutura e Tríplice Fronteira no passado e no presente
Em 2014 publiquei um livro no qual apontei a construção da rede de infraestrutura (pontes, estradas e Itaipu) como a base para a formação da região da Tríplice Fronteira. Estou convencido de que o atual movimento da Itaipu Binacional direcionando esforços para o desenvolvimento e a infraestrutura pode ser outro marco estrutural importante para a história do desenvolvimento desta região internacional.
No passado, as obras de infraestrutura conectaram o Brasil e o
Paraguai. Por meio da Ponte da Amizade, da BR-277 e da Ruta 12, Assunção foi conectada ao Oceano Atlântico por via terrestre. Além de permitir o transporte de pessoas e produtos para a construção de Itaipu, essa rede de infraestrutura se ampliou (foram construídas as rodoviárias e os aeroportos internacionais, além da Ponte Tancredo Neves) e desenvolveu o comércio regional e internacional. Foram as grandes obras de infraestrutura que conectaram e deram vida demográfica e econômica para a Tríplice Fronteira.
No presente e logo mais no aniversário de 50 anos do Tratado de Itaipu, em 2023, seremos por volta de 1,3 milhão de habitantes, com mais de cem mil pessoas e 40 mil veículos que cruzam a Ponte da Amizade diariamente. Os números indicam que estamos interconectados, o que é positivo, mas as filas e as necessidades básicas de controle migratório e aduaneiro mostram que temos problemas estruturais. Por isso é estratégico e imprescindível o investimento em infraestrutura.
Já está em curso a construção de uma nova ponte (Foz do Iguaçu -Presidente Franco) e de um “multiviaduto” (com pontes, túneis, intersecções e rampas) em Ciudad del Este). Ambas as obras contam com o financiamento da Itaipu Binacional e certamente representam uma mudança de infraestrutura tão importante para a região quanto aquela que possibilitou sua formação e a construção da própria usina.
Infraestructura y Triple Frontera en el pasado y en el presente
En 2014 publiqué un libro en el que señalaba la construcción de la red de infraestructura (puentes, carreteras e Itaipú) como la base para la formación de la región de la Triple Frontera. Estoy convencido de que el movimiento actual de Itaipú Binacional que dirige los esfuerzos de desarrollo e infraestructura puede ser otro hito estructural importante para la historia del desarrollo de esta región internacional.
En el pasado, las obras de infraestructura han conectado a Brasil y Paraguay. A través del Puente de la Amistad, BR-277 y Ruta 12,
Asunción está conectada al Océano Atlántico por tierra. Además del transporte de personas y productos para la construcción de Itaipú, esta red de infraestructura se expandió (las carreteras, las estaciones de autobuses y los aeropuertos internacionales se construyeron, además del Puente Tancredo Neves) y se desarrolló el comercio regional e internacional. Fueron las grandes obras de infraestructura que conectaron y dieron vida demográfica y económica a la Triple Frontera.
En la actualidad, y pronto en el 50 aniversario del Tratado de Itaipú en 2023, seremos alrededor de 1.3 millones de personas, con más de 100 mil personas y 40 mil vehículos cruzando el Puente de la Amistad diariamente. Las cifras indican que estamos interconectados, lo que es bueno, pero las colas y las necesidades básicas de migración y control de aduanas indican que tenemos problemas estructurales. Por este motivo, la inversión en infraestructura es estratégica y esencial.
Se está llevando a cabo la construcción de un nuevo puente (Foz do
Iguaçu-Presidente Franco) y una gran obra con puentes, túneles, intersecciones y rampas en Ciudad del Este. Ambas están financiadas por
Itaipú Binacional y sin duda representan un cambio de infraestructura tan importante para la región como el que hizo posible su formación y la construcción de la planta en sí.