MÉXICO EN VOZ DE
Philippe Starck.
Considerado uno de los pioneros del concepto de diseño democrático, el francés ve la creación como una herramienta para mejorar la vida del mayor número posible de personas. Starck empuja los límites del diseño a través de objetos cotidianos, así como proyectos de arquitectura y de ingeniería naval y espacial.
¿Qué representa México para ti? Es una tierra de pasión, humanidad y amor; estos valores forman parte de mi filoso a y de mis creaciones. Lugar favorito en el país: La Ciudad de México, por su atmósfera vibrante. Hotel predilecto: El mítico Camino Real Polanco en la Ciudad de México, por su arquitectura audaz y su colección de obras de arte. Restaurante favorito: Rosetta —de la chef Elena Reygadas—, un sitio íntimo donde lo tradicional se mezcla con la cocina creativa. Un arquitecto mexicano: Pedro Ramírez Vázquez, por el Museo Nacional de Antropología. Un diseñador en México: Emmanuel Picault y su galería Chic by Accident, que cuenta con colecciones hermosas de piezas de diseño y antigüedades. Además, representa la esencia de la elegancia en una casa encantadora de la colonia Roma. Artista mexicano que admiras: Aarón Changpo —el fundador de la marca Varon—, por su creatividad y visión, que expresa en su colección de joyas. Comparto la misma visión: lo ‘sin género’ es el futuro. ¿Qué opinas del diseño mexicano? No me interesan el diseño y la arquitectura; me interesan los efectos que tienen en la vida de la gente. Las fronteras ya no existen; muchos grupos de personas diferentes viven en varios países. En México es lo mismo, hay distintos grupos de personas con una cosa en común: la pasión.