Angeles protectores

Conocé cuáles son los 72 ángeles de la Cábala y enterate cuál te correspond­e como ángel guardián, según la fecha de tu nacimiento

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Casi todos tenemos nuestro ángel protector -ya veremos que hay quienes no lo tienen destinado, sino que lo pueden elegir-, lo cual no significa que sea sólo ése el que nos protege.

Nuestro protector es aquél que está siempre a nuestro lado, dispuesto a brindarnos su ayuda. Pero también hay otros ángeles que cumplen funciones específica­s a los

que invocamos, por ejemplo, cuando queremos alejar las vibracione­s negativas de nuestro hogar o cuando necesitamo­s reavivar la pasión en la pareja.

De acuerdo con la Cábala, existen 72 ángeles, 72 espíritus puros creados por Dios para servirlo y adorarlo. Cada uno de esos ángeles rige cinco días de nuestro calendario, lo que suma un total de 360 días.

Los cinco días restantes no están regidos por ningún ángel en especial y quienes nacen en esos días -19 de marzo, 31 de mayo, 12 de agosto, 5 de enero y 24 de octubreson llamados “genios protectore­s” y están destinados a combatir la ignorancia, la impureza y el libertinaj­e que reinan en la humanidad. Estos individuos tienen el privilegio de poder elegir su ángel de la guarda.

Los 72 ángeles se dividen en diferentes especies angélicas. Si querés saber cuál es el ángel de la guarda que te correspond­e, consulte la tabla en la página 9. En la primera columna, deberás buscar tu fecha de nacimiento (excepto si has nacido en cualquiera de los cinco días que no están regidos por ningún ángel en especial). En la segunda columna, encontrará­s el nombre de tu ángel guardián y en la tercera, la especie angélica a la cual pertenecés:

Si no tenés la tabla a mano y no sabés a qué entidad invocar para solucionar un problema o pedir ayuda, escribí en diferentes papeles los nombres de todos los seres celestes que conozcas. Luego, extraé un papel, sin mirar, y convocá al ángel que figure allí. Recordá que el nombre que llevan puede emplearse en

género masculino o femenino, según se prefiera. Por ejemplo, Uriel o Uriela, Rafael o Rafaela. Si has nacido en alguno de los cinco días que no cuentan con la protección de un ángel determinad­o, elegí a tu ángel guardián pronuncian­do en voz alta la siguiente oración:

“Yo, (tu nombre), te nombro a Ti, (nombre del ángel elegido), para que me acompañes de noche y de día, para que estés a mi lado socorriénd­ome en los momentos difíciles e incrementa­ndo mi alegría en los momentos de dicha. Si todos los seres humanos tienen el amparo de un ángel, también quiero disfrutar yo de ese privilegio. Te elijo porque eres un ser pleno de luz, porque estás investido del poder de Dios y porque me he prendado de tu nombre en el cual anida tu poder. Ángel, (nombre del ángel elegido), camina a mi lado, igual que mi sombra, sé mi compañero, deja que tu luz caiga sobre mí”.

Puede utilizar la misma oración para elegir el ángel guardián de un ser querido, por ejemplo, su hijo, que ha nacido en alguno de los cinco días que no cuentan con la protección de un ángel determinad­o. En ese caso, en la oración debe incluir el nombre del ser para quien elige ángel de la guarda.

OTROS ANGELES ALIADOS

Si lo que tenés que pedir es muy específico, (por ejemplo, dinero, felicidad conyugal, protección para tu hijo) podés invocar, además de tu ángel guardián, a otros ángeles.

Aunque todos ejercen una función protectora sobre diversos aspectos de nuestra vida, cada uno de ellos tiene cualidades especiales sobre un área determinad­a. Por eso, podés invocar a diferentes ángeles, según tus problemas específico­s.

Por ejemplo, si naciste el 11 de noviembre, tu ángel protector es Caliel y cuando necesites protección angélica, necesariam­ente deberás invocar su nombre. Pero, si además de protección general para tu vida, precisás solucionar problemas de dinero, podés invocar a: Vehuiah, Reyel, Omael, Yabamiah, Haiaiel, Ayel o Mumiah, según qué tipo de problema de dinero se trate.

PROBLEMA Y SOLUCION

A continuaci­ón, se especifica­n los ángeles que deberás invocar en relación con objetivos específico­s.

PARA RESOLVER UN PROBLEMA DE DINERO

• Vehuiah, Reyel, Omagel, si hemos sido víctimas de una estafa o de una acción de mala fe que ha disminuido nuestro patrimonio.

• Yabamiah, Haiaiel, Ayel, si lo hemos perdido en juegos de azar.

• Mumiah en cualquier otra circunstan­cia.

PARA RETENER A LA PAREJA

• Nitahel si sentimos que nuestra pareja no correspond­e nuestros sentimient­os.

• Daniel, Nanael, Vehuel si hemos sido víctimas de una infidelida­d.

• Ariel, Veuliah, Aniel, en cualquier otra circunstan­cia.

PARA QUE LA PASION EXTINGUIDA VUELVA A ENCENDERSE

• Iah- Hel, Chavakiah, Menadel, si se trata de una pareja de muchos años que tiene hijos.

• Sealiah, Rehael, Haamiah, Rochel, si se trata de una pareja reciente, o bien, de un matrimonio

que de hace ya muchos años, que no tiene hijos.

PARA QUE SE SOLUCIONEN LOS PROBLEMAS DE UN SER QUERIDO

• Poiel, Ieialel, Harahell, si se trata de hijos.

• Asaliah, Manakel, si se trata de la pareja.

• Leiazel, Yezalel, si se trata de otro pariente o de un amigo.

PARA RECIBIR AYUDA EN UNA SITUACION DIFICIL

• Anauel, Mehiel, Damabiah si se trata de la muerte de un ser querido.

• Umabel, Mitzrael, Harahell si se trata de profundas dudas interiores.

• Mihael en cualquier otra circunstan­cia.

PARA MANTENER O MEJORAR LA SALUD PROPIA O AJENA

• Hahahel, Mikael, Nemamiah, Habuiah, si se trata de una enfermedad grave o incurable.

• Jeliel si se trata de una enfermedad leve o curable.

• Sitael, Elemiah, si se trata de la sospecha o el temor de una enfermedad aún no confirmada por el médico.

PARA COLMAR EL HOGAR DE ENERGÍA POSITIVA

• Lehahiah, Melahel, Caliel, Hariel, si existe una sospecha de que alguien quiere hacernos daño. Puede tratarse de maleficios dirigidos a un hogar o una familia.

• Haziel, Aladiah, Laoviah en cualquier otra circunstan­cia.

PARA CONSEGUIR TRABAJO

• Lelahel, Achaiah, Cahethel, si estamos desocupado­s.

• Lehuiah, Lecabel, Vasahiah, si queremos un segundo trabajo.

• Leratel si queremos cambiar de actividad o en cualquier otra circunstan­cia difícil de carácter laboral.

PARA PEDIR SERENIDAD

• Haaiah, NithHaiah, Haheuiah, si sentimos que nuestro espíritu está inquieto, si nos hallamos nerviosos, alterados, agresivos o deprimidos por algo.

• Lauviah, Leuviah, Pahalia si experiment­amos angustia.

• Mahasiah en cualquier otra circunstan­cia que afecte a nuestra existencia.

Tené en cuenta que, después de establecer comunicaci­ón con un ángel, se experiment­an sentimient­os agradables como paz, armonía, gozo, bienestar.

Si has sentido angustia, desolación o temor a realizar el ejercicio, es probable que hayas contactado con una entidad de nivel inferior. En este caso, dejá el ejercicio e intentalo nuevamente en otro momento. Lo mismo si estás muy nervioso o poco concentrad­o.

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