Milena Oliveira
“Si una semana antes me decían que esto iba a pasar en Chile les hubiera dicho que era imposible”, responde al otro lado del teléfono Milena Oliveira, desde las oficinas de 3M en Santiago de Chile. Es jueves 24 de octubre y los empleados de la empresa empezaron a volver a la oficina de manera paulatina, con horario de media jornada, debido al conflicto social que se vivió en las calles de la ciudad.
“Gerenciamos como prioridad número uno la seguridad de los empleados. Tenemos un sistema de seguridad global y un grupo local con el que nos reunimos en comité para garantizar la seguridad”, cuenta. Oliveira asumió en 2018 la gerencia General de 3M para el Cono Sur, que incluye a la Argentina, Chile y Uruguay.
A los 18 años no se imaginaba en esta posición: quería estudiar medicina. “El ingreso es muy competitivo y quedé como segunda opción para Administración de Negocios. Pero después de seis meses estaba entretenida con la carrera y con mis compañeros, y me quedé en Administración”, cuenta. Ya en el segundo año de la carrera aplicó a una pasantía para trabajar en 3M y quedó seleccionada. “La persona que era mi jefa me dejó reacomodarme para seguir mis clases a la mañana. Desde ese momento a hoy siempre tuve muchas oportunidades”, asegura.
Oliveira ingresó en Marketing y luego pasó a un área de innovación en la que se involucró desde el día uno para el proceso de transformación de la empresa y que le dio una visibilidad tal que la consideraron para un proyecto en los
Administración de Empresas en la Universidad Católica de Campinas (PUCCAMP), Brasil. Máster en Administración de Empresas del Carlson School of Management de la Universidad de Minnesota, Estados Unidos. 3M. Lideró negocios en Estados Unidos, Europa y América latina. octubre 2018.
Estados Unidos. Empezó un recorrido global que la tuvo allí; luego en Bruselas, de vuelta a Estados Unidos y, desde 2017, en América latina. Reconoce y destaca el acompañamiento que hizo la empresa. Para Oliveira la clave está en dar el ejemplo: “La mejor herramienta es liderar con el ejemplo. Nosotros nos enfocamos en trabajar el trato, y lo hacemos en charlas y entrenamientos para ver los tipos de comunicaciones que hacemos para generar un ambiente propicio para la diversidad entendida en sentido amplio de género, culturas, creencias, estilos de vida, lo que sea”.
Oliveira no titubea si tiene que reconocer que lo más difícil para ella es el balance entre la vida personal y profesional. Madre de una hija y liderando el negocio en tres países con “situaciones externas y de contexto muy diferentes”, se define como intensa: “Cuando tuve a mi hija, me tomé cinco meses y medio de licencia por maternidad. Estábamos en Estados Unidos y mi marido pudo sacar tres meses en su trabajo para estar también, lo cual no era usual”. Cuenta que ese combo hizo que pudiera continuar trabajando desde la casa. “Nunca dejé de hacer cosas. Como amamanté 13 meses, traté de conciliar mi trabajo con una posición en la que no tuviera que viajar tanto”, relata.
Al repasar su experiencia, Oliveira reconoce que el apoyo y la ayuda son clave, y destaca el trabajo de mentorías, en especial de reverse mentoring en el que jóvenes guían a las generaciones con más experiencia: “Es una herramienta súper valorada, porque no solo el mentor te provee ayuda, sino que además se aprende en el proceso y se mejora el ambiente. Siento que es win-win”. Lucila Lopardo.
Noviembre 2019