Blindados contra la crisis
Las fintech no detuvieron su crecimiento a pesar del panorama económico. El siguiente paso es la regionalización y abandonar el monoproducto, aunque pisan con cuidado ante el fin del laissez faire del Banco Central. Qué le depara al sector en 2020.
Si la industria argentina fuera una carrera de autos, sin duda hay varios sectores que durante 2019 tuvieron que pedir una grúa y muchos también quedaron a mitad de camino tras enfrentarse a algunos "miguelitos" económicos que los hicieron pinchar su andar. Construcción, textil y retail sobresalen como los que tuvieron que pasar por boxes para sobrellevar la situación. Pero,
entre ellos, la banca aparece como uno de los más afectados con 14 meses consecutivos de caída en la actividad económica, de acuerdo al estimador mensual (EMAE) publicado por el Indec. Como si hubiera contratado un blindaje antes de empezar a correr, la industria fintech continuó con su andar de crecimiento a lo largo del año, ralentizado por el enfriamiento de la economía, pero estimulado por el potencial del sector en la inclusión financiera
Gastón Irigoyen, CEO de Naranja X.
Febrero 2020 y su propuesta de valor respecto de la del segmento tradicional.
Prueba del ímpetu del rubro es su incremento en cantidad de jugadores. Según el último relevamiento realizado por la Cámara Argentina de Fintech a fines del año pasado, existen 223 compañías que ofrecen servicios financieros basados en tecnología, 90 más que las que reportaba un año antes y un 110 por ciento de alza versus el número de julio de 2018. El segmento dedicado a los créditos sigue como el principal impulsor con un 26 por ciento, seguido por pagos digitales (17,4 por ciento del share) y proveedores tecnológicos, que cierra el podio con un 13 por ciento de participación.
A esto se le suma el atractivo que los players locales despertaron en los inversores internacionales. El caso más resonante es el de Ualá, fundada por Pierpaolo Barbieri en 2017, que recibió una inyección de US$ 150 millones, su serie C, en noviembre de 2019. La ronda estuvo liderada por la tecnológica china Tencent y el fondo de innovación del holding japonés Softbank. En tanto, Findo, plataforma dedicada al negocio de préstamos, tiene al inversión del fondo de capitales canadienses Latus View, que cuenta con el economista Federico Sturzenegger entre sus asesores, lo que le permitió regionalizar su negocio y llegar a México, Uruguay y Paraguay.
La juventud y el nivel de innovación del sector, apuntan, fueron algunos de los factores que lo protegieron de la crisis económica. Su buena salud también posibilitó que generara empleo de alto nivel con 9500 trabajadores, de acuerdo a lo relevado por la cámara. Incluso la firma de recursos humanos Randstad lo identifica como uno de los cinco segmentos con mayor demanda laboral para 2020. “Las fintech traccionan cada vez más búsquedas ya que muchas de estas empresas nacieron recientemente y aún se encuentran desarrollando sus equipos de trabajo”, explica el reporte.
Estos números llevaron a que la banca, poco a poco, deje de plantear la dicotomía del versus y abrace la cooperación. La encuesta global fintech realizada por PWC arrojó que la mitad de las instituciones financieras en el país es
tán asociadas a fintech y que 8 de cada 10 esperan ampliar este tipo de alianzas en los próximos tres años.
Pero a pesar de la primavera que viven hoy, se espera que a partir de este año la línea de cal en la que están habilitados a operar se marque con un color más intenso. Durante cuatro años, la anterior administración del Banco Central trabajó con una filosofía que muchos llamaban de “dejar hacer”. No obstante, la nueva cúpula cree que el negocio alcanzó una madurez que lleva a necesitar de una regulación que elimine posibles grises. “La regulación es una de las principales amenazas en los próximos años, nos va a obligar a ser más conservadores. Era una actitud esperable del Gobierno que ganó”, cuenta el director de una importante startup.
Para las empresas, el segundo semestre (como en tantas otras ocasiones) será el momento en el que podrán despegar su potencial, una vez que se acomode la economía. Regionalización y consolidación aparecen como los principales objetivos de los players que quieren expandirse, reducir el riesgo argentino y convertirse en una "navaja suiza" de las finanzas –una plataforma multiuso.
Empresas por categoría.
26% Créditos
2% Ciberseguridad
8% Inversiones
Sobre un universo total de 223 fintech
6% Insurtech
Paula Arregui, senior VP y COO de Producto de Mercado Pago.
taja”, apunta Andrés Rodríguez Ledermann, gerente de Operaciones de Ualá. La firma superó las 1,5 millones de tarjetas emitidas y las 250.000 cuentas comitentes dadas de alta. “Crecemos 20 por ciento semana a semana en asset under management del fondo”, detalla. La compañía liderada por Barbieri también consiguió un lugar entre los 50 jugadores emergentes a tener en cuenta a nivel mundial en la lista 100 Leading Global Fintech Innovators de KPMG y H2 Ventures. En 2018, el representante local había sido Ripio, de cripto.
“Hubo mucho interés en las criptomonedas como una alternativa de ahorro, tanto en las especulativas, como bitcoin, como en los tokens emitidos por empresas que son no volátiles”, afirma Sebastián Serrano, CEO de Ripio. Según Matías Friedberg, fundador de la fintech factory Ixpandit, el vertical de criptoactivos aumentó 33 por ciento en cantidad de clientes. Su compañía desarrolló la plataforma de créditos personales Adelantos y en 2019 triplicó la cantidad de solicitudes aprobadas (del 10 al 30 por ciento). “El escenario lentifica pero no detiene”, dice.
ecosistema fintech argentino cristalizó su buen momento a nivel regional y los referentes en la materia mencionaron, durante el Argentina Fintech Forum de noviembre, que sobrepasó a Colombia en cantidad de emprendimientos y quedó tercero en América latina, detrás de México y Brasil. Un relevamiento interno de la cámara estima que la cantidad de créditos originados creció 15 por ciento de 2018 a 2019 y Bruzzo estima que se otorgan alrededor de $ 2000 millones por mes.
“La industria financiera funciona terriblemente mal y debe estar en el top de ineficientes de cara al consumidor final. En cuatro años, el Gobierno