Vuelta al juego
Luego de un par de navidades decepcionantes, los fabricantes de juguetes vislumbran algunos atisbos de una recuperación. Los desafíos para que la industria nacional vuelva a crecer.
Fue un Día del Niño distinto. No solo porque el sábado previo las jugueterías no estaban atestadas de adultos buscando regalos, sino también por los números que arrojó la jornada posterior. Tras dos años de caída en las ventas, el rubro logró recuperar un cuarto de sonrisa al saber que una de sus fechas más importantes del año había finalizado con un alza interanual del 1,3 por ciento, de acuerdo a un relevamiento de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ).
Quizá no sea una cifra descollante porque, según afirman los empresarios del sector, “se venía de un piso bajo”. Sin embargo, los fabricantes ven en el horizonte los primeros destellos de una recuperación para su negocio, princicelencia palmente dado por la desaceleración de las importaciones, el desarrollo del e-commerce y un consecuente potencial crecimiento de mercado para los productos nacionales.
La pandemia por supuesto que impactó en el funcionamiento, ya que, si bien la venta grande de juguetes se da en agosto y diciembre, empiezan a elaborarse desde enero para llegar sin sobresaltos. Buena parte de las fábricas estuvo cerrada desde marzo hasta mediados de mayo, lo que provocó una retracción en la oferta nacional, mientras que los productos que llegaban de afuera, principalmente de China, que representa más de un 90 por ciento de la importación, satisfacían esa demanda que creció en la época del quedarse en casa.
“Afectó de manera muy asimétrica porque hubo plantas que pudieron abrir porque estaban en el interior, eran exportadoras o porque se encuentran en parques industriales. Pero somos optimistas porque también se pudieron bajar los altos stocks que habían quedado de los dos años recesivos del gobierno anterior”, comenta Emmanuel Poletto, presidente de la CAIJ.
La Navidad y el Día del Niño son los principales focos de atención de la industria juguetera, aunque en los últimos calendarios venían dejando datos en rojo. En el primero de los casos el